La AGENDA URBANA ESPAÑOLA (AUE), aprobada en 2019, busca ser el futuro marco estratégico y operativo en materia de desarrollo urbano, estableciendo un abanico de políticas urbanas de carácter económico, medioambiental y social que puedan ser puestas en práctica por cualquier municipio y dirigir las políticas urbanas autonómicas y municipales a convertirse en catalizadoras de los cambios necesarios con los que establecer y fomentar una nueva visión urbana integral y participativa desde la que mejorar las condiciones de vida de sus habitantes.
Hace unas semanas el alcalde de Huelva, Gabriel Cruz, presentó en la Casa Colón, la AGENDA URBANA DE HUELVA a los agentes sociales, empresariales y económicos de la ciudad. Un modelo de ciudad vinculado directamente con la Agenda 2030, con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y con los retos que tenemos como especie humana, población mundial y como planeta. Una ciudad inclusiva, resiliente, sostenible, segura, compacta, habitable, en una ciudad para las personas, que posibilite el desarrollo económico, pero, sobre todo, una ciudad también responsable con el consumo de los recursos naturales.
Queda patente la visión y firme apuesta europea por un desarrollo urbano MÁS INTELIGENTE,
SOSTENIBLE, INCLUSIVO y RESILIENTE; Retos, todos ellos, que no pueden ser obviados por los órganos municipales. Ahora, más que nunca, es preciso dar respuestas más ágiles, más inteligentes, más eficientes y sostenibles a la nueva realidad de nuestras ciudades.
La crisis climática es ya una realidad en España. El efecto del cambio climático se nos muestra en dos fenómenos opuestos que están haciendo estragos en las ciudades de todo el mundo: las inundaciones y las sequías. Hace algunas semanas también lo sufrió nuestra provincia. Hay que estar preparados para gestionar el nuevo régimen de precipitaciones, incorporándose a la economía circular, buscar el reaprovechamiento constante de los recursos, la emisión cero de residuos y hacer nuestras ciudades más resilientes ante todos estos retos.
Digitalización, Agua, Reutilización, Energía, Residuos, Salud Ambiental, Cambio Climático, Renaturalización, y Ciudadanía, que constituyen una verdadera revolución verde para un crecimiento sostenible, justo y resiliente. AGUAS DE HUELVA trata de buscar las soluciones que permitan aumentar el aprovechamiento, la reutilización y el ahorro energético.
De cara al medio plazo se ultiman los proyectos presentados para captar inversión en beneficio de la ciudad, tanto de los fondos de recuperación Next Generation, como de las subvenciones que puedan llegar. En este sentido, destacan:
Proyecto de resiliencia urbana ante el cambio climático, enfocado a mejorar la respuesta de la ciudad ante episodios extremos de sequía o de inundaciones, que abarca tanto las redes de agua como de drenaje, tanques de tormenta, etc.
Proyecto Smart Huelva, de digitalización de la ciudad, ya comenzado mediante el despliegue de la telelectura en la ciudad o el uso de tablets y tecnología para el control operativo de redes de abastecimiento y saneamiento de los operarios de la compañía. Asimismo, se quiere incrementar la monitorización y control total de la red mediante un mayor protagonismo del Telemando.
ECOCIUDAD UN PROYECTO INNOVADOR PARA UN CRECIMIENTO SOSTENIBLE
El Proyecto ECOCIUDAD, tiene por finalidad la conversión de la depuradora de Huelva en una ecofactoría capaz de producir recursos para la ciudad, mediante la reutilización de las aguas, buscando sinergias con la industria cercana. Este proyecto minimiza los impactos al entorno natural y la producción cero de residuos, valorizando lo que hasta ahora eran residuos como subproductos. Igualmente se persigue el objetivo de ‘cero dependencias energéticas’, el autoabastecimiento y hasta la producción de combustible verde para el exterior. La búsqueda de impacto social positivo y la preservación de la biodiversidad son otras de las líneas de trabajo enmarcadas en este proyecto.
En el marco de los procesos de mejora continua de Aguas de Huelva, la empresa desea contar gracias al proyecto ECOCIUDAD con las infraestructuras necesarias y los procesos adecuados para lograr la reutilización de las aguas residuales municipales que, aunque depuradas al 100% e inocuas, actualmente son vertidas al medio natural. Además de la reutilización del agua se busca un autoconsumo total. Actualmente se aprovecha con el biogás de los procesos de depuración un 65% del consumo eléctrico de la EDAR. Incrementar el aumento del ahorro energético a través del biogás se complementaría con la implantación de placas fotovoltaicas en las instalaciones (sede, ETAP y EDAR), otro de los retos de la empresa para los próximos años.
