Con los nervios a flor de piel unos y con los vellos de punta otros, estremecidos por la reapertura del Gran Teatro a las carnestolendas, se dio el punto de arranque para este Carnaval Colombino de 2022 con uno de los actos más representativos de la fiesta, la entrega de Insignias de la Federación y el esperado pregón de Fali Ramos.
Para abrir boca Antonio Cabezas fue la persona expresamente elegida por el pregonero para realizar la presentación y semblanza del mismo, algo que dada la maestría del orador prometía una buena noche sobre las tablas. Cabezas resaltó de manera sublime la trayectoria del pregonero, destacando la impronta personal del mismo y a quien describió de manera cervantina para atribuirle la genialidad inequívoca que posee y por la que es reconocido dentro y fuera de su tierra.
El pregón acorde a su título comenzó del revés, con todos los integrantes que pasarían por el escenario encima de él y aplaudiendo en lenguaje de signos, manos arribas y agitándose al unísono de un lado para el otro, para una vez desalojado el escenario comenzar a dar las gracias a todas aquellas personas y gremios que hacen posible cada año la maquinaria del Carnaval se ponga en marcha y no pare incluso una vez terminada la fiesta; FOPAC, medios de comunicación, costureras, artistas del disfraz y los atrezos, donde destacó el trabajo de Chema Riquelme quien además le había aportado el atrezo del propio pregón; maquilladoras, tramoyistas…
Acto seguido el pregón se volvió a la narrativa convencional, comenzando el pregonero a contar su propia historia dentro de la fiesta, rememorando aquella su primera agrupación infantil-juvenil salida del colegio José Oliva en 1987, su bagaje como componente de agrupaciones hasta llegar a aquel mítico año de 1995 en el que unos chavales, la mayoría primos de sangre salieron por primera vez con la murga de «Entre Primos tos tablao», alzándose sorprendentemente con el Primer Premio Local y Provincial. Aquella primera agrupación salió por la Peña de Enrique Villegas, siendo al siguiente año cuando se presentase ya como la más que conocida peña de Los Primos.
Muchos son los premios obtenidos por Fali a lo largo del Concurso, tanto en carácter de Local y Provincial como el absoluto abierto a partir de 2000. Fali se confesó rival acérrimo de la murga de Jesuli Perojil con la que durante años mantuvo el pulso carnavalesco sobre las tablas.
Ramos contó al respetable su periplo onubense en la modalidad de comparsa y su reconocida labor vocacional como director de las mismas, así como su incursión en la fiesta gaditana, donde enarboló la bandera de Huelva como indiscutible estandarte de su visible talento, que hizo que en Cádiz se le conozca y respeto como a Fali de Huelva, y es que cerca de 50 agrupaciones aportadas al Carnaval de Huelva entre propias y colaboraciones dan para mucho respeto y para mucho pregón.
También tuvo momento para recordar su trabajo con otros dos grandes de la fiesta: el ya desaparecido Manuel Cordero y Manuel Fernández. Solicitó además la creación de la Escuela de Carnaval de una vez por todas, de la que espera se nutra la cantera carnavalesca onubense y, resaltó la figura del edil onubense; Gabriel Cruz por su cercanía y compromiso para con el Carnaval, para el que solicitó el aplauso de los presentes.
Entre bromas y no bromas llegó a disertar sobre la diferencia entre murga y chirigota a su manera, pero lo que verdaderamente mantuvo el pregón en la línea del espectáculo fueron las distintas interpretaciones que se dieron sobre el escenario, para ello contó con miembros de la agrupaciones que durante su trayectoria cantaron en sus filas, así se pudo ver a la chirigota de primeros de los 2000, que interpretó en una sola pieza un engarzado de tres pasodobles, representativos de; «Los padres del siglo XXI» (2004), «Los muertos de los 80» (2005) y «La tía Manoli» (2008). Del mismo modo otra formación puso sobre el escenario la representación de su paso por la modalidad de comparsa, y lo hizo utilizando un pasodoble «Calla charlatán» de una agrupación inédita en el Gran Teatro «Los niños». El mismo ejecutó uno de sus pasodobles característicos: «Con la ilusión de un chavalito» de la comparsa «Los bromistas» (2001) y buena parte del grupo originario de Los Primos nos hizo recordar la presentación de «Los Moncherines de Febrero Roché» (1996).
Coplas tras copla se pudo disfrutar del arte de su hija; Vanesa Ramos, acompañada por el mismo y por David Tristancho al cajón y del espectáculo de «Ni chicha ni limoná», agrupación que viene paseando desde hace unos años por distintos escenarios.
Concluida la denominada por él mismo parte onubense, se hizo acompañar en escena por amigos de la fiesta gaditana, donde «Los Ya son Five» presentados por Justo Barragán interpretaron algunos pasodobles conocidos por el respetable y sobre todo una buena carga de humor que hizo disfrutar al Gran Teatro. Fueron despedidos por nuestro pregonero con la interpretación junto a Barragán de un pasodoble del referente e histórico gaditano Joaquín Quiñones del que Fali ha interpretado buena parte de su obra quedando plasmada en el disco «Tributo a Joaquín Quiñones».
Para broche del pregón entró en escena la comparsa de Quiñones con la que Fali compartió carnavales y escenario en su paso por Cádiz y con la que quiso deleitar a su público cantando con ellos la presentación de «Noche de Falla» (1994) y el un pasodoble de «La caldera» (2006).
El público en pie despidió con palmas por Huelva a su profeta carnavalesco, Rafael Ramos Eugenio.
