Dependiendo y partiendo de la antigüedad de tu coche nuevo:
- En el caso de que no supere dos años: Vale la pena tener un seguro a todo riesgo y en caso de tener un siniestro, asumir la diferencia de precio. Normalmente las aseguradoras suelen pagar el 100% o una estimación cercana al 90% del valor venal del coche. Ese valor compensa en vehículos de alta gama.
- Cuando el vehículo tiene entre dos y cuatro años: seguirá siendo de provecho tener un seguro a todo riesgo, sin embargo después de este tiempo tienes que empezar a plantearte otro tipo de seguros. En ese caso puedes utilizar este comparador de seguros de coche https://seguros-coche.
arpem.com/. - A partir de los cuatro y seis años: la mayoría de personas prefieren no seguir pagando un seguro a todo riesgo, ya que el valor del vehículo se habrá reducido a la mitad. En ese momento se puede optar por un seguro a terceros ampliado.
- Si tu bolsillo te lo permite: es importante asumir con mucha responsabilidad el importe a pagar y saber si se puede cubrir el importe de un seguro a todo riesgo.
- Dependiendo de la siniestralidad que tengas registrada: desde hace años existe un fichero o historial de manejo en el que se encuentran registrados todos los siniestros, multas, etc. de cada conductor. Esta es una herramienta que ayuda a las aseguradoras a valorar tu perfil como piloto y aplicar descuentos o recargos.
¿Que es un seguro a todo riesgo con franquicia?
Entendamos en breves palabras que es una franquicia.
Una franquicia es una cantidad económica pactada entre el asegurado y la compañía que él mismo asume en el caso de tener un siniestro con el vehículo.
A mayor franquicia, mayor será el descuento sobre la prima inicial que te aplicará la aseguradora. Existen muchas opciones de franquicias para poder elegir entre ellas la que sea más conveniente en función del ahorro que se quiere conseguir.
Esta modalidad de seguro a todo riesgo con franquicia es recomendable para conductores responsables que no suelen tener accidentes, se escuchara como algo obvio pero es muy importante tener esta información en cuenta y saber que si el objetivo es ahorrar una parte de la prima se debe ser un conductor con experiencia y responsable al conducir.
Por el contrario aquellos conductores que sufren frecuentes percances, aunque sean pequeños, no son los más indicados para tener una póliza de seguro como esta, pues aunque paguen menos del seguro terminan pagando más en gastos de reparaciones.
¿Es necesario incluir un conductor ocasional en el seguro de coche?
Las aseguradoras aconsejan que si se va a ceder el coche a los hijos o una persona que ha obtenido el carnet recientemente, se les incluya dentro de la póliza. La verdad es que añadir un conductor considerado de riesgo, puede elevar bastante la prima del seguro.
¿Cuánto cuesta incluir un conductor ocasional en la póliza? tienes que saber a quién o qué características considera la aseguradora como un conductor de alto riesgo. En general las aseguradoras consideran conductores de alto riesgo a personas que no tienen antigüedad en su carnet de conducir y a personas jóvenes. Ya que la experiencia y la edad son dos factores que influyen mucho en la póliza del seguro.
¿Qué pasa con mi seguro si otra persona tiene un accidente en mi coche?
Para responder esta pregunta tenemos que tener en cuenta si el conductor que ha sufrido el accidente está figurado en la póliza o no, otro aspecto fundamental es si, el conductor esporádico es culpable o víctima.
Si es el culpable del siniestro, lo primero a recalcar es que la aseguradora se hará cargo de todos los daños a terceros, sean materiales o personales.
Con respecto a los daños propios, se tomará en cuenta si el conductor eventual es un conductor de alto riesgo o no.
En el caso de tener contratado un seguro a todo riesgo, si la persona que iba conduciendo en el momento del accidente no está incluido en la póliza, y cumple con las características de un conductor de alto riesgo, el seguro no cubrirá la reparación del coche. Al contrario si la persona que conduce el coche cuenta con un perfil de riesgo similar al del asegurado, la aseguradora puede cubrir los daños en su totalidad o un porcentaje de los mismo o incluso no hacerse cargo de ninguno de ellos.