El Hospital Infanta Elena ha iniciado en estos días las obras de adecuación y remodelación de varias salas dentro de su Servicio de Radiodiagnóstico para albergar un nuevo equipo de tomografía computarizada (TAC), el segundo con el que cuenta el centro hospitalario, con el fin de seguir potenciando su capacidad diagnóstica para poder ofrecer una respuesta más rápida, segura y completa al resto de especialidades.
Este nuevo equipo de TAC, que viene a sumarse al incorporado en el año 2021 también considerado de alta gama, cuenta con grandes prestaciones y permitirá la realización de nuevos estudios específicos destinados a mejorar la asistencia sanitaria que se presta a los ciudadanos. Un esfuerzo inversor importante, ya que el proyecto total supondrá una partida de más de 484.000 euros, teniendo en cuenta las obras a realizar y el coste del equipo electromédico.
Las obras que se están realizando en estos días servirán para adecuar la zona que albergará este nuevo TAC, por lo que se está actuando tanto en las salas 8 y 7, como en el área de control. El objetivo primordial es reorganizar los espacios para permitir la instalación del nuevo equipo, facilitar la accesibilidad de los pacientes encamados y mejorar la comodidad y seguridad para pacientes y profesionales.
Para ello resultará necesario cambiar los sistemas eléctrico, de gases medicinales y de climatización, las luminarias, carpintería y solería, además de proceder al cálculo e instalación del blindaje protector o plomado de todo el recinto, con el fin de proteger de la radiación y ofrecer una óptima seguridad a pacientes y profesionales.
El nuevo TAC, que presenta importantes prestaciones y que supera en gran medida la capacidad diagnóstica del equipo anterior, es capaz de realizar pruebas para la detección del código ictus, perfusión cerebral, atención oncológica, estudios vasculares y de Traumatología, y todo ello con una menor dosis de radiación, por lo que supondrá una importante mejora en la capacidad diagnóstica del centro, reforzando a su vez las prestaciones con las que cuenta en general la provincia.
Una buena noticia teniendo en cuenta la importancia de este equipo para la resolución diagnóstica del resto de especialidades, ya que solo en lo que va de año se han realizado en el Hospital Infanta Elena cerca de 10.000 estudios de TAC a pacientes de su zona de adscripción.
Una vez más los Servicios de Tecnologías de la Información y Comunicación, STIC, tendrán que participar de una forma muy activa en la puesta en marcha de estas instalaciones, ya que los equipos están conectados entre sí con el PACS centralizado del Servicio Andaluz de Salud y con el Centro avanzado de Diagnóstico por Imagen (CADI), permitiendo la monitorización en tiempo real del funcionamiento de los equipos, las dosis administradas y la homogeneización de protocolos diagnósticos.
Este nuevo TAC se integrará en el proyecto Huella de Energía, que tiene como objetivo que la sanidad pública andaluza disponga de la mejor información diagnóstica por imagen que la tecnología actual pueda ofrecer, con la mayor seguridad para el paciente y dentro de un proyecto de desarrollo sostenible. Además, parte de la financiación procede de la Unión Europea, a través del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia- NextGeneration EU, dentro del Plan de inversión en equipos de alta tecnología del Sistema Nacional de Salud, incluidos en el Programa de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España.
El Hospital Infanta Elena ha visto mejorar significativamente su equipamiento electromédico en los últimos años, sobre todo en el área de Radiodiagnóstico, en el que además de un primer TAC de última generación adquirido el pasado año, también se han incorporado dos nuevas salas radiológicas robotizadas, dos equipos portátiles digitales y numeroso equipamiento con las mayores prestaciones, con el que garantizar una asistencia sanitaria de calidad.