Viajar es un placer, aunque a veces los preparativos generen un estrés que nadie cree merecerse. Una vez elegido destino y con la fecha de salida a la vuelta de la esquina, pensar en la maleta es un paso primordial. Si se viaja en avión, la pregunta de “¿facturo o no facturo”? no te la quita nadie.

Independientemente del medio de transporte, es posible hacer la maleta siguiendo los principios del minimalismo. Ser inteligente a la hora de preparar el equipaje consigue ahorrar mucho espacio y, además, permite cumplir con los límites de peso si vas a coger un vuelo (comprueba antes del viaje el de tu aerolínea).

Guía básica para una maleta eficaz

La perfección está en la organización y en no ser exagerado con las necesidades que uno se cree tener y después resultan no ser tantas. 7 pares de calcetines para 3 días, pues sabes que no son necesarios, pero la cabeza se dispara más aún si ve huecos libres. Céntrate y sigue estos pasos.

1. Haz una lista

La primera regla de todo es deja el “por si acaso” en casa: por si llueve, por si hace calor, por si se sale de noche, por si se hace deporte… No; estos supuestos solo te harán hacer malabares para meterlo todo en la maleta y, reconócelo, nunca se da ninguna de las situaciones en las que se piensa.

Ten en cuenta que en la versatilidad está el truco. Cuanto más combinables sean las prendas que lleves, más espacio ganarás a la hora de hacer el equipaje, y lo mismo sucede con el calzado. Para un viaje de entre 1 semana y 10 días no necesitas más de 3 pares de zapatos incluidos los puestos mientras sean cómodos y peguen con todo.

2. Deja atrás los “por si acaso”

La vida te ha traído un nuevo reto: hacer la maleta para las vacaciones del 2023 y tú tan feliz. Ahora, toca centrarse y hacer una lista con las cosas que te gustaría llevar (otro asunto será lo que finalmente te lleves), después de haberte informado de la meteorología de los días que vas a estar fuera.

Cuando la lista esté hecha, espera un día y vuelve a leerla para eliminar lo que no sea imprescindible. Este será tu primer cribado y tienes que ser honesto contigo mismo. La planificación se basa en cubrir las necesidades durante tus vacaciones y debe incluir ropa, ropa interior, calzado, neceser y complementos (los justos y necesarios).

3. Prepara el neceser con cabeza

Las exigencias de un neceser para equipaje de mano en un vuelo nada tienen que ver con un viaje en otro medio de transporte. Por esa razón, este post se centra en el primer supuesto. Si consigues un neceser minimalista para volar, desplazarse en tren, coche, autobús o barco ya será pan comido. Ahí van los consejos esenciales:

• Adecua el tamaño del neceser a la duración del viaje.
• El neceser tiene que se impermeable porque contiene líquidos. Así se evitan toda clase de disgustos si un bote se abre.
• Compra un kit dental de viaje tamaño mini con cepillo y pasta.
• Los líquidos necesarios son: gel, champú, mascarilla, crema solar y cosmética facial habitual todo en tamaño mini y reglamentario (no más de 100 ml) metidos en una bolsa con zip transparente.
• Cepillo del pelo o peine (lo que uses habitualmente).
• Pañuelos de papel o toallitas higiénicas.
• Particularidades de cada uno: lentillas, solución salina, gotas para los ojos, medicamentos varios…

Si el neceser tiene compartimentos, la organización será más fácil. Hoy en día venden botes vacíos de distinto formato (espray, dosificador o los de la tradicional tapa) en todas la perfumerías y centros comerciales) ya sea vacíos o llenos. También hace el apaño los botes de gel y champú de los hoteles que seguro que tienes en casa alguno.

Cómo distribuir las prendas

Aunque hay varias teorías al respecto, un buen doblaje es la clave del éxito. O casi mejor, enrollar la ropa en lugar de doblarla hará que ocupe todavía menos espacio y, además, haya disponibles recovecos en los que meter objetos como el cargador de móvil, por ejemplo. Consejito: antes de enrollar los pantalones, hay que doblarlos por la mitad.

Hay quien prefiere la técnica de guardar la ropa al vacío en bolsas de plástico como método de ahorrar espacio. Se puede hacer en casa empaquetando las prendas en bolsas y usando una aspiradora o comprando bolsas especiales para ello. Hoy en día se puede encontrar organizadores de viaje de toda índole en internet.

Pequeños consejos que te harán el viaje más sencillo

Una vez controlado cómo preparar tu equipaje, qué llevarte y cómo empaquetarlo de la mejor manera posible, puedes seguir estas recomendaciones que te harán economizar espacio. Una vez asimiladas, solo te quedará poner todo en práctica y disfrutar de las vacaciones de este año, sean cuando sean.

1. Vete completamente aseado

Aunque esto parezca una obviedad, si sales de casa con el pelo limpio, la mascarilla del pelo dada, la crema hidratante echada y todo lo que necesites, cuando llegues a tu destino no será algo que tengas de hacer de inmediato y ganarás un día. Si quieres hacerte algún tratamiento capilar o facial, hazlo antes o después para no llevarte cosas de más.

2. Lleva puesto lo que más abulte

Ese abrigo que tanto pesa, ese jersey de lana o esas botas que no caben bien en la maleta serán tu indumentaria de viaje (siempre y cuando sean necesario y hayas aplicado ya el principio de prioridad antes mencionado). Como todos los datos de este post, es especialmente si vas en avión.

Si necesitas inspiración, puedes seguir los consejos de la gurú en organización Marie Kondo. Quizás sus vídeos te ayuden a hacer la maleta perfecta, a priorizar, a doblar cada prenda para que ocupe el mínimo espacio posible y a librarte de las arrugas cuando llegues a tu destino.