En paralelo, Cepsa lanza una nueva tarjeta profesional, Starresa Zero, mediante la que sus clientes profesionales podrán compensar el 100% de las emisiones de cada repostaje de manera inmediata, ver en sus facturas la progresiva compensación de forma mensual e, igualmente, obtendrán un certificado que acredite la ejecución de este compromiso.
Cedric Vigneau, director de Fleet Solutions & CRT de Cepsa, ha señalado “uno de los objetivos de nuestra estrategia Positive Motion es facilitar a nuestros clientes la descarbonización de su actividad. Para ello, vamos a ayudarles a reducir la huella de carbono de sus repostajes, mientras seguimos avanzando en la producción de moléculas verdes a gran escala y el despliegue de puntos de recarga eléctrica, que nos permitirán poner a su disposición distintas alternativas de movilidad sostenible: biocombustibles de segunda generación, hidrógeno verde y la mayor red de carga ultrarrápida de España y Portugal que estamos desarrollando”.
Así, la compañía energética se convierte en un catalizador en el proceso de descarbonización de sus clientes profesionales, facilitando la compensación de su huella de carbono de una forma sencilla y directa. Por otro lado, la compañía está compensando las emisiones de sus clientes de gasóleo para calefacción durante este invierno.
En su estrategia 2030, Cepsa quiere ir más allá de las cero emisiones netas (net zero) e ir más allá, permitiendo a los clientes y a la sociedad avanzar en la dirección correcta (Net Positive). La compañía ha establecido una ambiciosa hoja de ruta para recortar sus emisiones, situándose entre las compañías referentes de su sector. En concreto, en 2030, reducirá sus emisiones de CO2 (alcance 1 y 2) en un 55% respecto a 2019, y aspira a alcanzar cero emisiones netas en 2050. En cuanto al índice de la intensidad de carbono de sus productos (alcances 1, 2, y 3), el objetivo de la compañía es reducirlo entre un 15 y un 20% en 2030.