El programa ‘Vacaciones en paz’, por el que niños y niñas saharauis pasan los meses de julio y agosto en municipios de la provincia de Huelva, ha realizado un llamamiento urgente para conseguir quince familias onubenses que acojan a los pequeños, y que sean así los 90 menores que puedan beneficiarse de un verano lejos de los campamentos de refugiados.

El diputado de Cooperación Internacional, Salvador Gómez, junto a los responsables de la Federación de Asociaciones Solidarias con el Sáhara de Huelva, ha presentado el programa, que la institución provincial apoya desde hace décadas, tanto económicamente -contribuyendo a los gastos de los vuelos de los menores a España-, como colaborando con la Federación en las actividades de la llegada a Huelva, reparto entre las familias y la despedida y partida de vuelta hacia los campamentos. El convenio destina 35.000 euros para ‘Vacaciones en paz’ y el envío de alimentos a los campamentos.

Gómez ha asegurado que “este es uno de los programas que sensibiliza la labor de la Diputación y que refuerza el trabajo que la Federación de Asociaciones Solidarias con el Sáhara viene realizando desde hace muchos años solidariamente, de manera incansable”. Según ha subrayado, los niños y niñas saharauis “se merecen una oportunidad de pasar un verano en paz en nuestra provincia, y yo estoy seguro que obtendremos la respuesta del pueblo onubense, que siempre ha sido solidaria ante  este tipo de llamamientos”.

La coordinadora del proyecto en la Federación, Guadalupe Camacho, ha explicado que este verano vendrán a la provincia “sesenta niños repetidores, que vuelven con las familias que los acogieron el verano pasado”. El objetivo es traer a treinta menores más “de los que quince ya tienen familias, pero necesitamos de manera urgente encontrar familias para los otros quince”.

La coordinadora insiste en la importancia de que los pequeños salgan de los campamentos y tengan un verano en paz: “sufren lo mismo que los niños otros países que están en guerra”. La llegada de los menores está prevista a finales del mes de junio, y permanecerán en nuestra provincia hasta finales de agosto. Este verano vendrán en su mayoría niños y niñas de 8 y 9 años, es decir los nacidos en 2014 que no pudieron venir el año pasado, así como los nacidos en 2015.

La acogida por parte de familias onubenses de los niños y niñas saharauis en los distintos municipios de la provincia de Huelva tiene como objetivo primordial sacar a los pequeños del desierto, donde en verano se superan los 55 grados de temperatura y no hay medios para combatir esas condiciones extremas. Los pequeños disfrutan del verano y de todas las actividades que se celebran en nuestros pueblos, pero sobre todo reciben el cariño de las familias, en las que conviven como un miembro más durante los dos meses.

Durante su estancia en la provincia de Huelva reciben revisiones médicas, atención y alimentación a la que difícilmente tienen acceso  También disfrutan de actividades de ocio y, sobre todo, del cariño de las familias de acogida para que estos niños y niñas pasan un verano inolvidable.

El presidente de la Federación, Luis Cruz, ha agradecido a la Diputación de Huelva su colaboración permanente con el pueblo saharaui, “sin la cual este proyecto no sería posible”. Según ha explicado la caravana con 30.000 kilos de alimentos y material de ayuda humanitaria recogida este año ya se encuentra de camino a los campamentos, después de que la Media Luna Roja se haya hecho cargo para hacer el reparto a las familias.

La Diputación, a través de su Servicio de Cooperación Internacional lleva años contribuyendo tanto a este programa humanitario como al complementario ‘Caravana por la Paz’, gracias al cual toneladas de alimentos no perecederos, medicamentos y medicinas se envían cada año a los campamentos de Tinduff, para paliar la situación de deficiencia alimentaria de las familias refugiadas.

Los población saharaui subsiste desde hace más de 30 años en campamentos que se ubicaron de manera provisional en la región de Tindouf, en el desierto del Sahara, a la espera de que se solucione el de forma definitiva el conflicto que los enfrenta con Marruecos y poder volver al Sahara Occidental.