Hace ya mucho tiempo que las leyes de protección de menores (internacionales, nacionales y autonómicas) privilegian las medidas de protección familiar sobre las medidas de protección residencial. Esta priorización no es arbitraria, pues responde a la evidencia contrastada a lo largo de años de institucionalización. La Ley de Infancia y Adolescencia de Andalucía señala que “la institución de la familia y el desarrollo integral de la persona en un contexto familiar no admite argumento en contrario.
El desarrollo y la conformación de la personalidad, la socialización, las pautas educativas o las relaciones afectivas, donde mejor se conforman y se adquieren, es, sin duda, en el seno de una familia”. En este sentido, y conscientes de que aún queda mucho que caminar para instaurar una cultura de acogimiento en España, organismos referentes en infancia (Unicef, POI-E, ETC.) recomiendan que se impulsen programas familiares alternativos para que aquellos/as menores que siguen viviendo en centros de protección, puedan tener acceso a experiencias familiares reparadoras, positivas y estables.
La Asociación Crecer con Futuro, lleva cerca de 20 años comprometida con el reto de contribuir a la reducción de la pobreza material y afectiva de la infancia y juventud invisibilizadas. Para ello, en Andalucía desarrollamos dos programas de Colaboración Social contemplados en la Ley de Infancia y Adolescencia de Andalucía. Uno de ellos, es el programa de voluntariado en centros de protección de menores en las provincias de Huelva, Málaga y Sevilla, y el otro, el Programa de Familias Colaboradoras, desarrollado con la colaboración de la Junta de Andalucía a través de las subvenciones IRPF y de la colaboración de Fundación “la Caixa”.
Pero ¿qué es exactamente el recurso de Familias Colaboradoras?
Es un recurso para menores que viven en acogimiento residencial y consiste en que estas chicas y chicos puedan contar con una persona/familia con la que compartir fines de semana y vacaciones. En esta relación de colaboración los y las chicas cuentan con una referencia adulta estable que tendrá un impacto positivo en su desarrollo y bienestar personal presente y futuro.
¿Quién puede participar?
Por un lado, todos los chicos y chicas que vivan en centros de protección de menores y que, entendiendo el recurso, quieran formar parte de él.
Por otro lado, el Programa de Familias Colaboradoras es accesible a cualquier tipo de familia: tradicional, personas solas, parejas homosexuales, familias reconstituidas, familias extranjeras residentes en Andalucía, etc.
¿Cuál es el proceso?
Las personas interesadas pueden ponerse en contacto con Crecer con Futuro para informarse, formarse, asesorarse y recibir acompañamiento del equipo técnico de esta organización.
¿Por qué participar en este programa?
Para que todas las niñas y niños, independientemente de su origen, tengan cubierta la necesidad básica de crecer rodeados/as de amor y cuidado, necesidad que es además un derecho ampliamente reconocido.
Porque todos/as somos responsables del bienestar de nuestra infancia, esperamos tu llamada para informarte sobre cómo ser Familia Colaboradora de alguna de estas niñas/niños. Tu colaboración es clave para que puedan Crecer con Futuro.
¡Sé valiente, da el primer paso!