Los profesionales del Servicio de Urgencias del Hospital Infanta Elena, con la colaboración imprescindible del área de Microbiología del Laboratorio de Análisis Clínicos y la Unidad de Enfermedades Infecciosas del centro, han dado un paso más en la lucha contra las enfermedades de transmisión sexual (ETS), con la implantación de un nuevo programa de detección precoz que permite agilizar el diagnóstico de estas patologías y la implantación del tratamiento, de forma que se mejore sustancialmente la recuperación y calidad de vida de los pacientes.
En realidad, se trata de la ampliación del ambicioso programa de cribado de VIH que el Servicio de Urgencias lleva desarrollando desde 2021 y que ha permitido identificar a varias personas que sufrían esta infección y ser derivadas a tiempo a la Unidad de Enfermedades Infecciosas para su atención y seguimiento. El criterio para la indicación de la prueba en los pacientes está relacionado, entre otras, con la presencia de determinadas situaciones clínicas, incluidas infecciones o la realización de ciertas prácticas, consideradas factores de riesgo para contraer el VIH o infecciones de transmisión sexual.
Se trata de un programa con el que los miembros del Servicio se encuentran muy comprometidos, teniendo en cuenta que ya desde 2020 varios de sus profesionales participaron en la elaboración de un Documento de Consenso para el cribado de VIH en el seno de la Sociedad Española de Urgencias y Emergencias (SEMES). Una línea de trabajo que acabó derivando en un proyecto a nivel nacional llamado “Deja Tu huella. En la lucha contra el VIH, pide una serología”, que se implantó en Andalucía de forma pionera poco tiempo después.
Precisamente aprovechando la experiencia, se ha decidido ahora poner el foco en un perfil de pacientes con sospecha de presentar infecciones de transmisión sexual. Tanto por su alta prevalencia como por su morbilidad, las ETS suponen un problema global de salud pu?blica. En los últimos años se ha constatado cómo algunas de ellas, como la sifílis, la clamidia y la gonorrea, muestran una preocupante tendencia ascendente, lo que supone un gran desafío, tanto por su magnitud, como por las complicaciones y secuelas que podri?an derivar de un diagno?stico y tratamientos tardíos.
Este protocolo común tiene un mayor sentido ya que la infección por VIH y las ETS están claramente interrelacionadas, compartiendo en muchos casos prácticas de riesgo, incidencia y mecanismos de transmisión. Es más, algunas ETS, especialmente aquellas ulcerativas, en las que se produce una erosión de la capa superficial de la piel o las mucosas, aumentan el riesgo de contraer o transmitir la infección por VIH.
Por otro lado, más de un 30% de los nuevos diagnósticos de VIH presentaron simultáneamente otra ETS o habían padecido una ETS en el pasado. De esta forma, un diagnostico microbiológico ágil y la rápida implantación del tratamiento constituyen la mejor forma de romper la cadena de transmisión de estas enfermedades.
Así, desde mayo de este año, en el que comenzaron a implantar de forma piloto esta nueva iniciativa, se han solicitado en el Hospital Infanta Elena 130 estudios de serología para la detección del VIH, de las cuales en 35 ocasiones han incluido también un estudio de posible ETS por criterios de indicación clínicos y/o epidemiológicos. Esto supone que entre un 25 y 28% de los que se les solicita serología VIH desde Urgencias, han contado también con un estudio para despistaje de ETS, de las que cerca de un 10% resultaron positivas para diversas enfermedades de transmisión sexual.
Entre las líneas de trabajo que se están diseñando para el futuro más inmediato destaca la ampliación de este programa para incorporar el cribado de la infección por virus de la hepatitis C (VHC) a aquellos pacientes a los que se les solicita la analítica de VIH, con el objetivo de implementar posteriormente un cribado de Hepatitis C que abarque a todo paciente al que se le realice una analítica desde Urgencias, sea cual sea el motivo de consulta.
Esta nueva iniciativa se enmarca en el programa de atención al paciente con determinadas enfermedades infecciosas con la que cuenta el Hospital Infanta Elena desde hace años y que presenta una larga trayectoria en la búsqueda activa, atención y seguimiento de los pacientes. Además, desarrolla con numerosas ONG diversos programas para la detección y cribado de este tipo de enfermedades en población muy vulnerable y en clara situación de exclusión social.