El senador del Partido Popular por Huelva, Juan Manuel González, ha destacado la apuesta del PP para «garantizar la seguridad y el bienestar de los ciudadanos» tras iniciar en la Cámara Alta la ampliación de la Prisión Permanente Revisable aprobada en 2015.
González, quien ha estado acompañado por el senador, Carmelo Romero, ha señalado que la segunda ‘Ley Feijoo’, a pesar del voto en contra del PSOE y sus socios de gobierno, se ha sacado adelante en el Senado por lo que se insta a modificar el Código Penal para ampliar los supuestos previstos en la reforma de 2015, a otros de especial gravedad.
«Queremos fortalecer la confianza en la Administración de Justicia y asegurar que nuestras leyes reflejen los valores de justicia y seguridad que nuestra sociedad demanda y merece, Con esta propuesta, buscamos ampliar los casos en los que se puede aplicar la Prisión Permanente Revisable, garantizando así una respuesta penal proporcionada a delitos de excepcional gravedad».
El popular ha explicado que entre las modificaciones propuestas se incluye extender la aplicación de la Prisión Permanente Revisable a los responsables de delitos contra la vida o la libertad sexual, cuyas penas sumen cien o más años; modificar las circunstancias agravantes relacionadas con delitos contra la libertad sexual, detención ilegal o secuestro, al asesinato le sigan actos de ocultación o destrucción del cadáver.
Además, incluir como circunstancia agravante el vínculo entre el delincuente y la víctima, como cónyuge, ex cónyuge, pareja de hecho, ex pareja de hecho, descendientes, ascendientes o hermanos, entre otros; y, por último, castigar la reiteración de conductas delictivas con la pena de Prisión Permanente Revisable.
El senador popular ha defendido que estas modificaciones se basan en criterios de necesidad y proporcionalidad, y están respaldadas por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que ha considerado la Prisión Permanente Revisable compatible con la Convención Europea de Derechos Humanos.
«Para el PSOE de Pedro Sánchez no es una prioridad. Para intentar complacer a sus socios con la amnistía ha sido lo más diligente pero, sin embargo, no tiene interés y sensibilidad para ajustar el código penal a las necesidades y garantizar la seguridad y la justicia para todos los ciudadanos con leyes que velen nuestra convivencia y planten cara con firmeza a quienes cometan en delitos».