La Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del Colegio Público Al-Ándalus, situado en el barrio onubense de Los Rosales, ha querido mostrar su indignación por la decisión de la Junta de Andalucía de suprimir una de las líneas de infantil del centro, a pesar, aseguran, de cumplir con las ratios de número de alumnos para mantener esa línea formativa.
Según han señalado fuentes del AMPA, en la actualidad el colegio público mantiene tres líneas educativas de infantil con 30 alumnos y para el próximo curso la quieren reducir a dos con 13 alumnos en una clase (los correspondientes a los niños y niñas de tres años) y 17 en la otra (los correspondientes a los niños de 4 y 5 años.
Así, explican que la Junta de Andalucía se acoge a la “excepción a la norma” para poder eliminar esta línea de infantil impidiendo que el centro escolar “pudiera crecer”, ya que en el caso de que nuevos alumnos quisieran llegar al colegio no se les podría apuntar por exceder las ratios, dejando al colegio público en una difícil situación.
“No podríamos matricular a nadie que viniera, es dejar morir al centro porque así lo quieren”, señalan. Además, desde el colegio han explicado que se trata de un centro educativo con un alto porcentaje de inmigración y con necesidades educativas especiales, por lo que consideran “más que necesario mantener esta línea para dar una adecuada formación”.
De momento, se han puesto en contacto con la Delegación de Desarrollo Educativo de la Junta de Andalucía, donde “han echado balones fuera” diciendo que la decisión viene de Sevilla y que no pueden hacer nada al respecto, señalan.
Además, indican que no es la primera vez que la Junta de Andalucía intenta suprimir la línea de tres años de este centro con criterios “poco claros”, pues ya intentó eliminar la unidad de tres años de este colegio, pero gracias a la “oposición frontal” del AMPA se consiguió revertir la situación, añaden.
El CEIP Al-Ándalus no es una excepción. También el CEIP Prácticas y el Doce de Octubre se encuentran en una situación similar, por lo que se perderían hasta tres líneas de infantil en los colegios de la capital onubense.