El Ayuntamiento de Hueva ha activado un nuevo equipo dentro de la Policía Local con el objeto de poner fin al problema de los coches abandonados en la vía pública. Un grupo de agentes que desde el pasado mes de mayo está encargado de manera expresa de atender todos los avisos de la ciudadanía, inspeccionando todos los vehículos denunciados y abriendo los procedimientos administrativos necesarios para su retirada.
Según ha puesto de manifiesto la concejala de Movilidad y Seguridad Ciudadana, Milagros Rodríguez, “nos enfrentamos a un problema desgraciadamente generalizado hoy en todas la ciudades y al alza, pero que al que nos hemos propuesto poner solución con un equipo especializado en la Policía Local y, por supuesto, con la colaboración de la ciudadanía”.
La edil ha avisado que “se trata de un camino de largo recorrido, primero porque nos hemos encontrado con más de 1.000 incidencias comunicadas por la ciudadanía de años anteriores sin responder en Línea Verde y, segundo, porque en este tema la ley es muy garantista con el propietario del vehículo y nos obliga a seguir un procedimiento administrativo con plazos muy largos que tenemos que cumplir”.
Desde el pasado mes de mayo, el nuevo equipo de la Policía Local está inspeccionando los coches, tanto de los avisos atrasados como de los más recientes, contactando primeramente con sus propietarios al objeto de conseguir que sean retirados sin la necesidad de un expediente o sanción. Las principales causas de abandono que se han detectado de estas inspecciones son casos de vehículos averiados o accidentados, así como de propietarios fallecidos, mayores o que se encuentran fuera del país.
Milagros Rodríguez ha hecho un llamamiento de concienciación y responsabilidad a la ciudadanía en este terreno, ya que “un coche abandonado constituye un foco de contaminación y suciedad, y seguridad de nuestros barrios, y además impide el uso del espacio que ocupa como plaza de aparcamiento por otro vecino”. Según la normativa vigente, para que un coche se considere abandonado y pueda ser retirado por la autoridad tiene que darse el caso de permanecer estacionado más de un mes con signos claros de deterioro y abandono que impidan su desplazamiento por sus propios medios, o bien le falten las placas de matrícula. Antes de que la grúa se lo lleve, el propietario tendrá un plazo de un mes para poder retirarlo.
En el caso de no ser encontrado el titular del vehículo por los agentes policiales, será necesario efectuar un requerimiento en el BOE, para que el propietario tenga conocimiento de su obligación, un trámite que en muchos casos alarga los tiempos de retirada definitiva por parte de la Policía.
Los propietarios de los vehículos que hayan sido retirados de la vía pública y se encuentren en el depósito tendrán un plazo de dos meses para retirarlo. Si en ese plazo no lo hiciera, será tratado como un residuo y trasladado a un centro autorizado de tratamiento de vehículos para su destrucción.