Se confirmaron los peores pronósticos y la volantista onubense Carolina Marín tiene roto el ligamento cruzado de la rodilla derecha, así como los dos meniscos, por lo que estará de baja entre 8 y 10 meses, según las pruebas que se le han realizado en Madrid este lunes, dónde ha llegado procedente de París.
La imagen de la lesión de Carolina Marín ha dado la vuelta al mundo después de que la volantista onubense sufriera una dolorosísima lesión cuando dominaba su partido de bádminton ante la jugadora china Bing Jiao He, en las semifinales de los Juegos Olímpicos de París, después de haberse impuesto en el primer set con claridad (21-14) y de ir ganando por 10-8 la segunda manga.
Marín ha declarado al llegar a Madrid que estaba destrozada, tras haber perdido por la lesión, la tercera que sufre en sus rodillas, la oportunidad de luchar por el oro y revalidar el triunfo que obtuvo en Río de Janeiro, en 2016. Este era su objetivo y se le esfumó justo cuando el partido lo tenía claramente dominado. La lesión le ha impedido jugar siquiera por la medalla de bronce, con lo que finalmente se ha clasificado cuarta, un diploma olímpico que a toda una multicampeona de Europa, del Mundo y de unos Juegos Olímpicos sabe a muy poco.
En la ceremonia de entrega de medallas, la china -que accedió a la final tras retirarse Marín-, subió al podio a recoger la plata con un pin del Comité Olímpico Español, en lo que ha sido un bonito detalle y su manera de homenajear a la jugadora onubense, que ha recibido el apoyo del mundo deportivo, político y de toda España a través de las redes sociales.