En el marco del Día Nacional sin Juegos de Azar, Izquierda Unida (IU) en Huelva ha solicitado medidas más contundentes para frenar el impacto de las casas de apuestas en la provincia, especialmente en las áreas más vulnerables. La organización ha pedido a la Junta de Andalucía que aumente la distancia mínima de estos locales a centros educativos, culturales y deportivos a 500 metros, en lugar de los actuales 150 metros.
«Esta normativa insuficiente y la falta de cumplimiento de la ley han llevado a que en Huelva se registre el índice más alto de locales de apuestas en Andalucía, con 120 establecimientos, lo que representa uno por cada 4.000 habitantes», se lamentan.
En este sentido, Marcos Toti, coordinador provincial de Izquierda Unida en Huelva, ha afirmado que, «es inaceptable que la administración siga permitiendo que estas instalaciones se establezcan tan cerca de espacios frecuentados por nuestros jóvenes. Esta distancia de 150 metros es irrisoria y no protege a nuestra juventud ni a los vecinos de los barrios más vulnerables, donde los dueños de estos establecimientos tratan de implantarse».
Izquierda Unida también destaca la problemática en zonas de bajos ingresos, donde estos establecimientos se concentran, agravando las condiciones socioeconómicas y afectando a los jóvenes. “La proliferación de casas de apuestas en barrios de renta baja no es casual. Se aprovechan de la desesperanza y de la falta de oportunidades en estos vecinos y vecinas”, ha añadido Toti.
Del mismo modo, ha recordado que la concejala Mónica Rossi, durante la pasada legislatura, presentó una propuesta en el Ayuntamiento de Huelva para extender la distancia de 500 metros no solo a centros educativos, sino también a espacios sociales y deportivos. Esta iniciativa fue aprobada por unanimidad, aunque su implementación depende de cambios en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Huelva y de una modificación de la ley andaluza por lo que aún no se ha puesto en marcha.
La situación en barrios como El Higueral ilustra la falta de aplicación de las regulaciones existentes. Vecinos de la zona llevan dos años denunciando la cercanía de casas de apuestas a los centros educativos ‘3 de agosto’ y ‘Juvenal de Vega’, sin que se tomen medidas efectivas al respecto. “Parece que la administración se tapa los ojos ante estas violaciones. No podemos seguir permitiendo que nuestros jóvenes y comunidades sufran los efectos de esta actividad sin control”, señaló Toti.
En cuanto a la legislación estatal, Izquierda Unida ha valorado las medidas adoptadas bajo la gestión de Alberto Garzón en el Ministerio de Consumo, que incluyeron restricciones en la publicidad de casas de apuestas, limitaciones en los bonos de captación de jugadores y la prohibición de patrocinios en equipos deportivos que impliquen llevar publicidad de apuestas en sus camisetas. Las sanciones por incumplimiento de estas medidas pueden alcanzar hasta un millón de euros, siendo hasta el momento las acciones más contundentes llevadas a cabo por una administración contra las casas de apuestas.
Con estas demandas, Izquierda Unida responde a la creciente inquietud social por proteger la salud pública y evitar que las apuestas sigan afectando de manera negativa a la juventud y a los sectores más vulnerables de la sociedad.