El Gobierno de España y los agentes sociales: sindicatos y las organizaciones patronales, trabajan desde hace meses en la reducción de la jornada laboral. Desde el Ministerio de Trabajo, y también desde los sindicatos, se insiste constantemente en introducir mejoras para la conciliación laboral y familiar que llevan irremediablemente a trabajar durante menos horas.
Sin embargo, desde las organizaciones patronales y muchas empresas todavía se muestran reacias a esta medida, de ahí que hasta el momento no haya acuerdo global. En cambio, otras compañías sí están por la labor de seguir adelante con estas iniciativas. De hecho, ya hay muchas empresas en las que se ponen en marcha fórmulas para reducir la jornada laboral, promover el teletrabajo y acelerar los procesos de conciliación.
Sea como fuere, parece claro que el objetivo debe ser el de incrementar la eficiencia en el trabajo en lugar de trabajar más horas. Y es que según los datos del estudio “La productividad del trabajo y la conciliación laboral”, (elaborado por EAE Business School) España es uno de los países en Europa donde más horas anuales se trabaja y el ratio productividad / hora trabajada apenas llega al 31,5%.
La ayuda de la informática para ganar en productividad
Trabajar menos horas parece un objetivo lógico a alcanzar como sociedad. Y lo es porque hay situaciones que promueven esa meta, como por ejemplo el teletrabajo. Además, otro motivo que invita a ello es facilitar la conciliación laboral y la probabilidad de que estas medidas inviten a un aumento de la natalidad. Cabe recordar que España, y también buena parte de Europa, se enfrentan desde ya y en las próximas décadas, a un grave problema de pirámide poblacional.
Hace ya unos años, en concreto en 2019, el Gobierno de España aprobó mediante Decreto-Ley la obligatoriedad de llevar un registro laboral de todos los empleados. La finalidad era evitar posibles incumplimientos de la jornada laboral y detectar las horas extra trabajadas.
Esta normativa se puede cumplir a través de diferentes fórmulas, mediante un registro manual o con sistemas informáticos o telemáticos. Y son precisamente esos programas o herramientas los que se han ido desarrollando y han facilitado, también de algún modo, el impulso de esta lucha de los trabajadores, la de trabajar menos horas.
Con softwares de recursos humanos como sesame, que incluye funciones para registrar el control del tiempo de trabajo, se puede acelerar la puesta en marcha de la Reducción de jornada laboral. Esta plataforma está diseñada para servir de ayuda a los departamentos de recursos humanos y participa en tareas que van más allá del control de la jornada laboral, pues incluye herramientas de control económico y funcionalidades para retener y atrapar el talento humano.
Con estos programas, tanto los responsables de recursos humanos como otras muchas áreas en las empresas, pueden automatizar tareas más rutinarias y dedicar su tiempo a labores que impulsen el crecimiento en la organización. Como beneficio añadido hay que sumar un menor registro de errores o fallos de carácter humano.
¿Cómo puede ayudar la reducción de la jornada laboral a las empresas?
En el blog de sesame apuntan una serie de ventajas que tradicionalmente se asocian a la reducción de la jornada laboral. En este punto, cabe reseñar que trabajar menos horas no es solo una lucha sindical desde hace años, sino que ya es una realidad en el plano legal.
Existen fórmulas para favorecer la conciliación que incluyen acortamientos en el tiempo de trabajo para cuidar familiares, a uno mismo o por otras razones de peso. Es algo que está incluido en el Estatuto de los Trabajadores.
Dicho esto, el debate actual pone el foco en reducir el tiempo de trabajo absoluto, sin importar si existe una causa que obligue a trabajar menos tiempo (reducción de la jornada por crianza o por cuidados). En este sentido, los partidarios de avanzar en estos derechos hablan del aumento de la productividad que puede conllevar y la satisfacción que genera entre los trabajadores.
Las jornadas más cortas de trabajo promueven un mejor equilibrio entre vida laboral y personal. La consecuencia directa es un mayor número de empleados más motivados y menos propensos a bajas laborales por el síndrome de burnout o agotamiento. Otro aspecto interesante es una mayor facilidad para retener el talento, ya que los trabajadores se sienten más implicados y comprometidos con la empresa y sus obligaciones laborales.
En resumen, aunque sigue habiendo una tensión política más que evidente, todo apunta a que en un futuro próximo las jornadas laborales serán cada vez más cortas, siempre que esta reducción vaya ligada a un incremento en la eficiencia y la cuenta de resultados de las empresas.