Los titulares de la Masa de Agua Subterránea La Rocina votaron este miércoles la aprobación del proyecto de estatutos y reglamentos que han de regir el funcionamiento de la comunidad de usuarios. La constitución de esta CUMAS (Comunidad de Usuarios de Masa de Agua Subterránea) es «imprescindible» tras declararse en julio de 2020 por la Junta de Gobierno de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) en riego de no alcanzar el buen estado ni cuantitativo ni químico.
Según ha indicado el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco) en una nota, a partir de ese momento se inició la constitución de la pertinente CUMAS como paso previo para elaborar el programa de actuación y el plan de extracciones que garanticen el aprovechamiento racional del agua en esta zona del entorno del espacio natural de Doñana.
El objetivo último es «recuperar el buen estado de la masa de agua subterránea y mejorar los ecosistemas asociados». Una vez aprobados los estatutos con esta votación por sus titulares, se inicia ahora la fase de información pública de los mismos con su publicación en el Boletín Oficial de Estado (BOE) y en la web de la CHG, así como en la sede de la Comunidad de Usuarios, en la Casa del Agricultor en Almonte (calle Martín Villa, s/nº).
A partir de su publicación en el BOE se abre un plazo de 30 días para que los estatutos puedan ser examinados y, en su caso, presentar las alegaciones oportunas. Una vez transcurrido este periodo, se remitirá a la CHG para la resolución definitiva de aprobación de dichos reglamentos y la constitución de la comunidad de usuarios. La masa de agua subterránea La Rocina cuenta con 318 titulares y 1.111 captaciones con las que se riegan más de 5.000 hectáreas.
Los titulares de las otras dos masas de agua subterráneas del acuífero de Doñana, Almonte y Marismas, declaradas también en riesgo de no alcanzar el buen estado cuantitativo tienen previsto convocar la votación de sus estatutos durante el próximo mes de diciembre.