La Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad y el Ayuntamiento de Lucena del Puerto han reforzado su trabajo conjunto de cara a erradicar los asentamientos en este municipio, uno de los más afectados de la provincia por esta problemática.
Lucena del Puerto forma parte del primer plan estratégico impulsado por la consejería para erradicar los asentamientos en las provincias de Almería y Huelva, el Plan Easen. Un auténtico frente común para conseguir erradicar las chabolas y a su vez avanzar en la inclusión social de las personas que residen en la veintena de asentamientos repartidos por el término municipal lucenero.
La iniciativa del Plan Easen de la Dirección General de Políticas Migratorias de la Junta de Andalucía se complementa así con la labor del Ayuntamiento, y sus detalles los ha explicado la delegada municipal del área de Servicios Sociales, Mari Luz Moreno.
La edil ha señalado que es una labor compleja pero que tanto su equipo como ella la abordan a diario después de que «el trabajo hecho por los diferentes gobiernos locales anteriores al presente haya sido más puntual». Mari Luz Moreno ha echado la vista atrás, hasta hace 24 años, y ha contado que «las acciones llevadas a cabo desde el año 2000 han sido asistenciales básicamente«, con colocación de módulos, asistencia en higiene, reparto de alimentos en la pandemia de la COVID y la limpieza de chabolas abandonadas.
En 2022 el Consistorio obtuvo una subvención de 251.000 euros para la construcción y equipamiento de una residencia de temporeros y, a partir de 2023, el Ayuntamiento de Lucena solicita una ayuda de la Junta de Andalucía, dirigida a entidades locales, para la atención a personas inmigrantes y emigrantes temporeras andaluzas y sus familias, «donde se crea el primer equipo de erradicación de asentamientos».
Así, gracias a la labor de la Dirección General de Políticas Migratorias y a la comunidad en prácticas Ubuntu se ha realizado el primer censo de las personas que viven de forma permanente en los asentamientos. Al Plan Easen se adhiere, asimismo, una trabajadora social.
De hecho, gracias a diversas subvenciones en 2024, se mantiene la contratación de la misma trabajadora social y una integradora social, siendo ésta la encargada de impartir las clases de español, entre otras actividades. «Se ha solicitado y aprobado para el año 2025 la misma línea de subvención», ha resumido la concejal.
Receptora de mano de obra inmigrante
Lucena del Puerto, como otros muchos municipios andaluces, es un pueblo receptor de mano de obra contratada en origen cada campaña agrícola de la recogida de los frutos rojos, que va desde enero a junio aproximadamente. La concejal ha señalado que en la localidad se da una convivencia entre las distintas culturas «por la facilidad que existe de acceso a todos los servicios que el municipio ofrece».
«Existe un gran respeto hacia las costumbres de todas las culturas que convivimos, la coexistencia de las distintas culturas es respetuosa. Dicha convivencia es sostenida en el tiempo desde que Lucena es receptora de las primeras personas extranjeras para la actividad agrícola a finales de los 90″, ha indicado Moreno.
No obstante, ha recordado que es más complicada la relación de los vecinos con los migrantes que viven en los campamentos, y viceversa, por la lejanía del núcleo urbano, pero cuando las personas acampadas acuden al pueblo «utilizan todos los recursos públicos y privados del municipio sin ningún inconveniente».
Más de 2.000 chabolas
A este respecto, los datos hablan por sí solos de la importancia de la colaboración Junta-Ayuntamiento para trabajar en este asunto. Lucena del Puerto ha llegado a tener censabas 2.115 chabolas entre los veinte asentamientos esparcidos por todo su término municipal. «Los puntos más poblados son los más próximos al núcleo urbano y los más cercanos al municipio de Moguer, que colinda ambos términos municipales y comparten explotaciones agrícolas».
La cifra actual es prácticamente la misma, aunque hay que hacer un nuevo censo. El Ayuntamiento no ha derribado ninguna chabola y las que han desaparecido han sido por algún incendio o los efectos del temporal, pero en algunos casos los propios migrantes las vuelven a levantar en el mismo lugar o cerca de donde estaban.
Mari Luz Moreno y su equipo están trabajando en fortalecer la colaboración de los vecinos en este tema. «Actualmente estamos intentando implantar la colaboración con el empresariado agrícola y poder llevar a cabo el plan de erradicación de asentamientos a través de la contratación de las personas migrantes y su consiguiente solución habitacional», explica.
Imprescindible la relación Junta-Ayuntamiento
Valora, además, que la relación con la Junta «es primordial para conseguir el objetivo de erradicar los asentamientos informales de Lucena del Puerto», y cree que el Plan Easen «es fundamental para conseguir tales objetivos. Sin la implicación de las administraciones es imposible trabajar y lograr la inclusión de personas residentes en zonas agrícolas de Andalucía conformadas por población migrante», ha subrayado Moreno.
Actualmente la relación es muy buena, y la edil ha agradecido el interés de la Junta «hacia la problemática que tenemos en nuestro municipio. Según ha explicado, la mayor necesidad que tenemos ahora mismo es la de limpiar unos asentamientos que tienen una acumulación de basura desde sus comienzos. «Necesitamos un plan de choque para poder limpiar tal acumulación de basura que, a su vez, está generando mayor vulnerabilidad, riesgo de contagios de enfermedades e incluso exclusión social, además de otras actuaciones que son igual de importantes», ha concluido.
El Plan Easen busca la implicación de todas las administraciones y mantiene la mano tendida al Gobierno central, a la espera de que se sume al mismo y forme parte de la búsqueda de soluciones a los asentamientos.