(Texto: José Carlos Aguado) El alcalde de Aracena y ya ex portavoz del PSOE en la Diputación, Manuel Guerra, ha negado hoy que su marcha de la institución provincial esté vinculada a la necesidad de entendimiento entre el Partido Socialista e Izquierda Unida para garantizar la gobernabilidad durante los próximos cuatro años tras perder el PSOE la mayoría absoluta en las urnas. Guerra traicionó a IU en 2002 marchándose al PSOE cuando aún era alcalde izquierdista y tras meses de engaños y mentiras.Guerra ha asegurado que él mismo solicitó a la dirección provincial del PSOE poner fin a su etapa como miembro de la Diputación para dedicarse de forma exclusiva a su labor como alcalde de Aracena. «Estos ocho años han sido una experiencia gratificante, pero ahora quiero estar en Aracena porque mi vocación política es trabajar desde la cercanía por los ciudadanos que me han elegido. Este es mi compromiso».
De esta forma, Guerra niega que su salida del gobierno provincial esté vinculada a la necesidad de entendimiento para garantizar la gobernabilidad de la Diputación entre PSOE e Izquierda Unida, partido al que traicionó marchándose al Partido Socialista como tránsfuga en 2002 y tan sólo unos meses antes de los comicios municipales de 2003.
Otro alcalde socialista acusado de transfuguismo hasta por el propio PSOE a nivel nacional, el primer edil de Jabugo y ex andalucista, José Luis Ramos, ha sido el elegido como diputado de la rosa y el puño por la Sierra.
Estériles quedan así las palabras de la que hace cuatro años era la presidenta de la Comisión de Seguimiento del Pacto Antitransfuguismo, la ministra Elena Salgado, quien mantuvo que el caso de Jabugo se enfrenta ahora «a las consecuencias acordadas en el Pacto Antitransfuguismo».
Lejos de tener “consecuencias”, tan sólo cuatro años después el PSOE onubense ha premiado a su alcalde en Jabugo pese a hacer trampas y valerse de un tránsfuga del PP para lograr una mayoría absoluta que le negó su pueblo en las urnas.
