El diputado del área de Bienestar Social, Salvador Gómez, ha participado en la jornada de clausura de los Talleres Infantiles de Educación en Valores que la Diputación pone en marcha en las distintas zonas de trabajo social de la provincia. Alrededor de 300 niños, acompañados de sus familias, han disfrutado de un día de convivencia en el parque Aquópolis de Cartaya.
El diputado ha destacado el trabajo de la familia “como pilar fundamental” para esta educación en valores, ya que los servicios sociales dan las pautas y donde se pone en marcha es en el seno de la familia. Gómez ha resaltado también que con esta clausura “seguimos poniendo en valor el ocio compartido en la familia, valor que reforzamos durante todo el año con otras jornadas de convivencia, con las que llevamos a la práctica la teoría y aprendemos haciendo”.
Los participantes de los talleres Chaman, Buba y Pirata, desarrolados en las Zonas de Trabajo Social del Cinturón Metropolitano, Condado Norte, Costa y Ribera del Tinto han participado en la jornada de este sábado junto a sus familias, acto que se suma al que tuvo lugar el pasado día 23 de junio, en el que participaron los niños y niñas de los talleres Tierra de Cuentos, Urium, Buba y Trotamuntos, desarrollados en las Zonas de Trabajo Social del Andévalo, la Cuenca Minera, la Sierra Oeste y el Condado Sur.
Los Servicios Sociales Comunitarios de Diputación de Huelva, dentro de la linea preventiva de formar para la convivencia familiar y social vienen desarrollando estos talleres desde el año 2000.
Se desarrollan en las 9 zonas de trabajo social( 72 municipios) de la provincia con la finalidad de contribuir a la construcción de una sociedad más plural y tolerante, mediante la formación de las generaciones futuras en valores sociales.
Uno de los objetivos fundamentales de estos talleres, es apoyar a las familias en su labor educativa. Por eso constituyen “uno de los programas preventivos grupales comunitarios más importantes de los que desarrollamos desde nuestros Servicios Sociales”. Su aceptación va pareja a su importancia, ya que “su valoración positiva por parte de padres y madres, centros educativos, ayuntamientos, los propios menores y la población en general, se incrementa edición tras edición”.
Los talleres, que se celebran con la colaboración de los Ayuntamientos y los centros educativos locales, adoptan una denominación distinta según la zona donde se desarrollan. Se han convertido en “uno de nuestros programas preventivos grupales comunitarios más importantes sino que sus denominaciones identifican ya plenamente a las zonas de trabajo social donde se materializan”.
Todos, sin embargo, tienen el mismo objetivo: la construcción de una sociedad más plural y tolerante, mediante la formación de las generaciones futuras en valores sociales como la solidaridad, la interculturalidad, la igualdad y el respeto a las diferencias.
Las áreas de trabajo más frecuentes que se desarrollan en los talleres son las de desarrollo y crecimiento personal, la educación para la convivencia, la educación en valores, el ocio y el tiempo libre y la educación para la salud.
Monitores/as y educadores/as sociales de las zonas son los encargados de impartir estos talleres, que se desarrollan con una media aproximada de 20 menores por taller, en sesiones semanales de 2 horas de duración.
En esta edición también han participado los municipios menores de 1.000 habitantes, gracias al nuevo Modelo de Concertación implantado por la institución provincial en 2016, los 72 municipios de la provincia menores de 20.000 habitantes podrán disfrutar de estos talleres, que favorecen la convivencia, la integración y la participación en la vida familiar y social.