No es habitual que un futbolista marque de rebote en un partido pero mucho menos que lo haga dos veces y en un corto espacio de tiempo. Eso es lo que ha conseguido el delantero mallorquín del Recreativo, Sergi Enrich, el cual marcó de rebote en el pecho ante el Hércules y frente al Barcelona B volvió a repetir la misma jugada con igual fortuna. El jugador reconoce que “en el vestuario me gastan bastantes bromas con este tema pero son sanas porque los goles han sido muy importantes aunque han entrado de rebote. Al final valen todos igual, sean con el pie, con la mano o con el culo. Para un delantero es importante marcar y seguir con confianza”.