Punta Umbría cumplió el jueves 49 años y lo hizo con la celebración de un Pleno Solemne en el que se entregaron las Distinciones 26 de abril, una mención especial al pueblo de Ayamonte, por la vinculación de las primeras familias con la barriada de Punta del Moral, y la nominación de las nuevas calles. En palabras del alcalde, Gonzalo Rodríguez Nevado, “han sido 49 años de trabajo, de unidad, de solidaridad; que se iniciaron en tiempos difíciles en los que la unión y la solidaridad fueron clave para el desarrollo del pueblo”.
Esa unión y solidaridad es la que vinculó Rodríguez Nevado a la celebración de las “bodas de oro como pueblo independiente el año próximo, que festejaremos como se merecen y en las que ya estamos trabajando”. También se pronunciaron en los mismos términos tanto el portavoz de la oposición, José Carlos Hernández Cansino, como el del grupo de Gobierno, Jesús Fernández Ferrara, apuntando el primero la creación de una comisión al respecto.
En este 26 de abril los distinguidos han sido dos asociaciones y tres vecinos que, a juicio del primer edil, “representan a gran parte de la sociedad local, pues estamos hablando de dos colectivos de lucha: uno por la salud y otro por la educación, a los que se une un puntaumbrieño que ha trabajado incansablemente por las tradiciones; junto a unos vecinos que vinieron de fuera, se enamoraron de esta tierra y aquí echaron sus raíces, más otra persona que lleva a gala el ser puntaumbrieño por todos los rincones de España”.
Se trata de la Asociación Resurrección, una entidad local de ayuda a drogodependientes, así como de las AMPAS, las asociaciones de madres y padres de alumnos de los centros escolares puntaumbrieños. Además, se distinguió al rociero Andrés Martín Hernández ‘Aparicio’, los responsables de la heladería ‘Los Valencianos’: Francisco Mullor y María Amparo Segura, junto al actor Carmelo García Crespo.
Para el regidor municipal, “la fuerza de las madres de Resurrección ha conseguido que cientos de puntaumbrieños nos sensibilicemos con el problema de la drogadicción”, al igual que “la fuerza de los padres y madres de las AMPAS ha logrado muchas cosas para los escolares del pueblo, como sucede ahora con la construcción del nuevo instituto”. A ‘Aparicio’ le definió con cariño como “buen amigo, buen padre y buen empresario”, del que “al escuchar su nombre, escuchas Rocío, por su lucha infatigable por la hermandad”. De Francisco Mullor y María Amparo Segura, por su parte, comentó que “durante décadas, han sido el espejo en el que se han mirado muchos negocios, por su buen hacer”. Y, de Carmelo García Crespo resaltó que, a su faceta artística, “se une la deportiva de primer nivel y la vinculación a una familia que le ha inculcado su amor por esta tierra”.
En representación de los premiados, García Crespo expresó la gratitud de cada uno por el gesto, al tiempo que incidió en que “para sentir un pueblo, debe existir ese pueblo. Por eso es importante que seamos pueblo desde hace 49 años, porque eso nos puso en el mapa”. Respecto al grupo de distinguidos, dijo que “todos le hemos aportado identidad a esta tierra, hayamos nacido aquí o no, porque la sentimos como nuestra desde la escena, desde la empresa, desde los colectivos, desde la educación”. De las calles dijo que “aunque los miembros de la Comisión Fundacional tenían Distinción 26 de Abril, no disponían de calle y ya era hora”.
En la recogida de la mención especial al municipio de Ayamonte, por la barriada de Punta del Moral, su alcalde, Antonio Rodríguez Castillo, reiteró que ambos enclaves se tienen “un cariño recíproco”, que espera que “nunca se pierda, a pesar de que pasen los años y se diluyan los parentescos que hoy nos unen, porque tenemos muchas cosas en común”. De ahí que pidiera que se fomentara “la relación entre pueblos, para redundar en el bienestar de todos”.
Nuevas calles
Por otra parte, como viene siendo habitual, el Ayuntamiento denominó diversas calles con nombres de vecinos ilustres. Esta vez, entre las vías denominadas estaban Tomás Ferrera, más conocido como Tomás Pinito, “cabeza visible de una familia marinera extensa, que es verdaderamente amante de nuestras cosas”, tal y como manifestó Gonzalo Rodríguez Nevado.
Otra de las vías fue a parar al ex alcalde Gregorio Jiménez Vidosa, que “gobernó el pueblo en momentos muy complicados, con la política local muy revuelta”. Él consiguió, como detalló su homólogo actual, “que se construyeran cuestiones básicas como la red de saneamiento o el colegio Enebral”, iniciando además las Normas Subsidiarias.
El que fuera practicante municipal, Antonio Ladrero Elías, resultó otro de los nombres con calle. Resaltó el alcalde de él su “profesionalidad y vocación”, mientras que su hijo hizo mención a “su amor por la educación y la sanidad”.
Se sumaron a estas designaciones las de los cinco miembros que integraron la Comisión Fundacional para la Segregación: Juan Manuel Ríos Martínez, Juan Coronel Prieto, Eloy Martín Mayor, Juan Hernández González y Juan Toscano Reyes. A Ríos Martínez, “abogado enamorado de Punta Umbría”, le reconoció el primer edil su labor en la tramitación del expediente. A Coronel, que aglutinara “ en su negocio al verdadero parlamento de entonces, el lugar de reuniones en el que se le tomaba pulso a la ciudad”. De Eloy Martín, presidente de la comisión, dijo que “se caracterizó por ser innovador y sentó las bases del futuro de Punta Umbría”. Asimismo, de Juan Hernández ‘Chumín’ aseguró que “se convirtió en uno de los empresarios pesqueros más importantes de la provincia. Propietario de muchos galeones y del conocido Patio Chumín”. Por último, Juan Toscano ‘Pascasio’ fue, en palabras de Rodríguez Nevado, “una persona solidaria, que regentó una de las cuestiones más importantes en la historia de nuestro pueblo: las canoas”.
