Entre 120 y 140 profesionales de los medios onubenses han secundado este jueves, Día Mundial de la Libertad de Prensa, el llamamiento de la Asociación de la Prensa de Huelva y han acudido a las 12.00 horas a la plaza de las Monjas de la capital para protestar contra la grave situación de crisis que atraviesa el sector.

La actividad periodística se ha paralizado en Huelva durante una hora gracias a que organizaciones políticas, empresariales y demás entidades sociales han escuchado la petición de la APH y no han realizado convocatorias de prensa entre las 11.30 y las 12.30 horas.

En la concentración, que ha estado apoyada por representantes de instituciones públicas y privadas y de los sindicatos mayoritarios, se ha dado lectura al manifiesto ‘Sin periodistas, no hay periodismo. Sin periodismo, no hay democracia’, un documento que parte de la premisa de que la libertad de prensa es un valor supremo de las democracias, que se fortalece con el ejercicio responsable del periodismo, cumpliendo las normas éticas y deontológicas por parte de periodistas y editores.

El manifiesto, que ha introducido y comenzado a leer el presidente de la APH, Rafael J. Terán, al que han tomado el relevo los periodistas Clara Aurrecoechea, Rafael López y Ana Martín, denuncia que en los últimos tiempos se han detectado restricciones como “las ruedas de prensa sin preguntas, los contenidos enlatados elaborados por los partidos, los bloques electorales y las iniciativas de distintas instituciones de limitar el derecho de información en las coberturas de sus actividades”.

El documento destaca los graves problemas que acusa la profesión, como “la reducción de las redacciones, las rebajas salariales y la sustitución de periodistas experimentados por becarios y contratados a los que se paga salarios indignos y que difícilmente podrán resistir las presiones de los poderes si su puesto de trabajo pende de un hilo”, así como los contratos de trabajo “en los que se exige la cesión total de los derechos de autor, y las ofertas de empleo indignas”.

La negativa de los gobernantes a asumir públicamente las explicaciones ante los ciudadanos, la utilización de las concesiones de publicidad institucional o las licencias de radio y televisión para castigar o premiar a medios y periodistas en relación con su línea editorial o la cobertura de una determinada información o los juicios paralelos, la compra de testimonios y la anulación de la presunción de inocencia, son otras de las restricciones que los periodistas denuncian en el documento promulgado hoy en toda España por las asociaciones de la prensa.

Asimismo, se ha recordado a los trabajadores de los medios que han “pagado con su vida la defensa de la libertad de expresión” y se ha exigido a los gobiernos “que persigan a los asesinos” de tales crímenes.

El acto concluyó con un alegato en defensa de los “medios de comunicación públicos”, promulgado por Rafael J. Terán, y con un grito de “¡Viva la libertad de expresión y viva la Pepa!” con el que se recordó el Bicentenario de la Constitución Española, estandarte de la libertad de prensa y de los derechos y libertades de los ciudadanos.