Linares de la Sierra ha vivido un año más su romería en honor a San Juan Bautista, patrón de la localidad. Una cita importante dentro del calendario festivo chicharrero, siendo fiesta local y siempre coincidiendo con el último sábado del mes de mayo. Una romería muy familiar y acogedora al ser una población pequeña. Incluso algunos romeros comentaban que había menos personas que otros años, aunque el ánimo y la alegría no aminoraban.
La previa tuvo lugar la noche del viernes con la misa de romeros. Ya el sábado por la mañana el pueblo se despertaba muy temprano con la alegre Diana a cargo de una Charanga de Guillena.
La comitiva partió en torno a las ocho y media de la mañana de este sábado hasta el paraje natural conocido como “La pájara”. La partida desde la propia iglesia de San Juan al son del tamborilero, el conocido Félix de Carboneras, que deleitó con su flauta y tambor a lo largo del camino
La Hermandad de San Juan Bautista, encabezada por su Hermana Mayor Eva María Ramos Domínguez, se fundó en 1997 y realizó su primera romería el año 2002. El simpecado, con la imagen del patrón perfectamente adornado y exornado con flores, iba en una carreta tirada por una mula. Entre los estrenos se pudo ver el trabajo de mejora y pintura de la canastilla en la carreta, realizados de forma altruista por el teniente hermano mayor y hermanos de la cofradía.
El recorrido de unos tres kilómetros discurrió con total normalidad y tranquilidad, ya que había tiempo suficiente para hacerlo pese a ir siempre cuesta arriba. Algo de calor al mediodía y fresquito por la mañana. Una oportunidad única para disfrutar de bonitos paisajes de nuestro Parque Natural y rincones maravillosos en el antiguo camino que une Linares con Aracena.
Por supuesto se realizaron las habituales paradas en el camino, momento de cantes y bailes en honor al patrón, además de tomarse algo para coger fuerzas en el camino. Entre las paradas más emotivas destaca la realizada en el paraje “Agua de la Paloma” donde se hizo el particular bautizo de los nuevos romeros.
Y justo después de salir del camino de la Molinilla hacia la carretera, donde cuatro efectivos de la Guardia Civil cortaban perfectamente la carretera en ambos sentidos, había otra parada ante un azulejo de la Reina de los Ángeles, justo en la puerta de la finca de Francisco Barrutieta, dueño del campo donde tiene lugar la misa de campaña y convivencia posterior de la Romería. Destacar la participación activa del coro local Ecos de la Sierra. La misa comenzó con puntualidad, una y media del mediodía, y después cada reunión se repartía por el campo, bajo la búsqueda de la sombra, para disfrutar en convivencia. Los miembros de la Junta de Gobierno invitaron a todos los presentes con bebida y comida para festejar la romería. A las seis de la tarde comenzaba la vuelta al pueblo por el mismo camino. La entrada en Linares, ante la presencia de los vecinos que no acudieron a la romería, discurrió por la plaza de toros en dirección a la iglesia de San Juan Bautista pasadas las diez de la noche. Ahora toca esperar al próximo año para hacer el camino, aunque las fiestas locales están a la vuelta de la esquina a lo largo del verano.