El sindicato CSI-F ha comenzado a analizar las modificaciones definitivas del Plan de Ajuste aprobado por la Junta de Andalucía y, en el caso concreto del sector de Enseñanza, ha observado que un profesor de Secundaria con 30 años de servicio dejará de percibir 2.620 euros anuales, mientras que un maestro en similares circunstancias dejará de percibir 1.858 euros anuales.

En concreto, en las pagas extraordinarias el profesorado dejará de cobrar el complemento específico básico y el complemento por cargo docente. Además, los docentes de Secundaria no cobrarán ningún sexenio y en el caso de Primaria sólo se percibirán los dos primeros. El polémico Programa de Calidad se mantiene y se descontará el 10% de las cantidades que perciba el profesorado por este concepto. Este montante se detraerá de las dos pagas extras, de junio y diciembre; como en la de este mes no ha dado tiempo, se prorrateará el importe del recorte durante los meses que restan para acabar el año.

El Decreto-Ley que se tramitará como proyecto de Ley y terminará su recorrido en el Parlamento antes de final de julio, también recoge que la ratio no se modifica salvo en las zonas de presión demográfica; además se aplicarán las 20 horas lectivas para los profesores de Secundaria, las sustituciones se regirán por la normativa del Estado y los profesores interinos finalmente no tendrán reducción de jornada ni bajada de sueldo.

De este modo, un profesor de Secundaria que lleve 30 años de servicio, siendo tutor y consolidado el Plan de Calidad, dejará de percibir 2.620 euros este año y un maestro de Primaria, en iguales condiciones, 1.858 euros. Además, un director de un instituto de Secundaria, con 30 años de servicio, llega a perder casi 3.700 euros, mientras que un director de Primaria, en similares circunstancias, dejará de recibir más de 2.600 euros. “Todo un premio a la dedicación, el compromiso y las ganas de trabajar para sacar adelante centros educativos cada vez más problemáticos y con menos recursos”, según se apunta desde el sector de Enseñanza de CSI-F.

Por otra parte, la Central Sindical considera que el aplazamiento de la aprobación del Decreto con la excusa de realizar una negociación con las organizaciones sindicales ha sido “pura demagogia y juegos de malabares para justificaciones políticas”, porque no ha existido negociación real y ha quedado simplemente en una cortina de humo. Ante esta situación, CSI-F mantiene todas las movilizaciones programadas como forma de denunciar el atropello que está sufriendo el profesorado y los empleados públicos en general.