El PSOE de Huelva ha mostrado su “apoyo incondicional” a los regantes del Condado que están reclamando al Gobierno central la Declaración de Evaluación Ambiental del proyecto, requisito fundamental para el comienzo de las obras que hará posible el trasvase de 5 hectómetros cúbicos de agua, declarados por el anterior Gobierno socialista de Interés General del Estado.

Tras una reunión con la Plataforma en Defensa de los Regadíos del Condado, el secretario general de los socialistas onubenses, Ignacio Caraballo, aseguró que “este agua es esencial para garantizar el futuro de la agricultura en esta comarca, un sector del que dependen miles de familias y en el que trabajan 80.000 personas”. Por ello, el socialista le ha pedido al Gobierno de España “que acelere los trámites porque la fecha propuesta en el mes de marzo de 2013 es demasiado tarde”.

En este sentido, Caraballo afirmó no entender “por qué el Gobierno central no colabora con los agricultores a los que le prometió en campaña electoral que llevarían a cabo este proyecto que ya contaba con los 17’5 millones necesarios para su realización”. El socialista advirtió que el Ejecutivo de Rajoy “está poniendo en riesgo la próxima campaña fresera si vuelve a repetirse un año seco como este”.

De este modo, Ignacio Caraballo señaló que mientras la Junta “trabaja a marchas forzadas” para resolver las 3.800 alegaciones recibidas al ‘Plan Especial de Ordenación de las zonas de regadío ubicadas al Norte de la Corona Forestal de Doñana’, donde se incluye esta zona agrícola, el Gobierno del PP “le da la espalda a estos agricultores y a los municipios que dependen económicamente de la agricultura”.

Además, el líder de los socialistas onubenses valoró que con este trasvase se cerrarían 900 pozos que se nutren del acuífero 27 de Doñana, por lo que “se contribuye también al mantenimiento del agua que mantiene con vida al Parque Nacional”. Así, Caraballo recordó que con este “retraso injustificado también se le está poniendo freno a la creación de 700 puestos de trabajo” que se generarían en la construcción de una estación de bombeo, una red de distribución de riego desde la nueva balsa que se construyó en Lucena del Puerto y una subestación eléctrica.

“RIESGO DE PERDER EL DINERO”

Por último, Caraballo se sumó a las críticas de los regantes al Gobierno central, ya que de entregarse la Declaración de Evaluación Ambiental en marzo, las obras no comenzarían hasta junio, “lo que pone en riesgo el dinero obtenido de los fondos europeos con el requisito de tener las obras ejecutadas al 50% a finales del año que viene”.

Por todo ello, el socialista insistió en que “hay que acabar con la incertidumbre de estos agricultores y de miles de trabajadores del sector agrícola en el Condado poniendo todos los motores en marcha para que el trasvase para estos regadíos sea una realidad lo antes posible”.