Ence-Energía y Celulosa presentará como “caso de buenas prácticas” de Gestión Forestal Sostenible, en el Grupo de Trabajo “Empresas y Biodiversidad” del próximo Congreso Nacional de Medioambiente, la gestión que desarrolla en la finca onubense “Los Barrancos”, donde el cultivo maderero convive con especies de aves protegidas, bosque autóctono e importantes yacimientos arqueológicos, entre otros valores del entorno.

En el monte “Los Barrancos” dentro del Parque Natural de Sierra de Aracena y Picos de Aroche, Ence ha diseñado un modelo específico de gestión consistente en la creación de corredores ecológicos mediante la fragmentación de las superficies plantadas, la conservación de vaguadas y barrancos y su conexión con manchas de vegetación autóctona.

En la misma finca, la compañía mantiene áreas de protección en torno a nidos de especies protegidas como la cigüeña negra y colabora con las administraciones locales y regionales en la puesta en valor del importante yacimiento arqueológico que se conserva, un poblado de la Beturia Celta que motivó la declaración de una parte del monte como “Bien de Interés Cultural”.

De forma concreta, dentro del compromiso de Ence con la sensibilización y divulgación de la importancia del entorno natural para la Sociedad se enmarca la edición, distribución y programa de dinamización de la Guía Natural de Hueva editada por la ONG Bosques Sin Fronteras con el patrocinio de la compañía.

La Guía Natural (http://www.bosquessinfronteras.org) es una propuesta de destinos a visitar en el rico entorno natural de la provincia onubense, una publicación que Ence ha convertido en un eje de comunicación con el que poner en valor los beneficios de una gestión forestal sostenible. La finca de “Los Barrancos” en la localidad de Aracena es uno de los destinos propuestos.

Ence mantiene y compatibiliza con sus cultivos forestales unas 18.000 hectáreas de bosques autóctonos y unas 2.200 de montes de alto valor de conservación que, además, se encuentran certificados bajo el esquema FSC. La compañía dedica esfuerzos a crear estructuras de gestión tecnificadas y eficientes que garanticen la sostenibilidad de la cadena forestal, transfiriendo conocimientos y colaborando en la formación e información de otros actores del sector forestal, desarrollando y participando en programas e iniciativas de sensibilización ambiental que colaboran en garantizar el futuro de ese entorno natural del que dependen sus actividades celulósicas y energéticas.