La Asociación de Obras Cristianas de Gibraleón, en la persona de su presidente, el sacerdote Diego Suárez Mora, y con ocasión del 27 aniversario de la explosión de Chernóbil, ha sido objeto de un acto público de reconocimiento por parte del Ayuntamiento de la capital de Ucrania, Kiev, ciudad en la cual existen seis centros de día -llamados Dom Kirios- de la asociación olontense destinados a atender a más de 400 niños y niñas de entre cuatro y diecisiete años, que después de casi 30 años de la explosión del reactor nuclear continúan sufriendo las consecuencias de aquel formidable desastre. En esos centros se les da apoyo alimenticio -fundamental para su recuperación- y escolar.
Así mismo, Obras Cristianas tiene desde hace años, en colaboración con la Fundación Internacional ‘Niños de Chernóbil por Sobrevivir’ de la capital ucraniana, un programa de vacaciones para esos chavales, a través del cual pasan en Huelva sus vacaciones de verano, habiendo disfrutado ya de las mismas más de mil niños del país eslavo, cuyas características pasan por ser todos ellos huérfanos y pobres y estar enfermos.
En un almuerzo de gala para unas quinientas personas, y en presencia del alcalde de Kiev y la delegada del Gobierno para Asuntos Sociales, el ayuntamiento de la capital ucraniana destacó en la figura del padre Diego Suárez los programas sanitarios, culturales y artísticos que en pro de la infancia de Ucrania desarrolla Obras Cristianas de Gibraleón, siendo muy alabada su actuación desde mediados de los años noventa en defensa de la misma. Por su parte, el padre Diego manifestó que “Dios elige a los más desgraciados y humildes para hacer su obra de amor”, añadiendo que “cualquiera que viera el sufrimiento de estos niños harían, como poco, lo mismo que yo hago”.
A la finalización del ágape numerosos ciudadanos ucranianos se acercaron a felicitar y agradecer personalmente al sacerdote onubense la gran labor social que desarrolla.