La Policía Local de Bollullos ha procedido en la madrugada del pasado 29 de agosto a la detención de dos personas de nacionalidad rumana, que responden a las iniciales P.V. y C.P, y que fueron sorprendidos en tejados de las calles Velarde y Luís Benjumea.
Tras el aviso de algunos vecinos, que habían escuchado ruidos sospechosos, la Policía Local se personó en el lugar de los hechos y realizó un “aposadero” con la intención de evitar cualquier acción punitiva, deteniéndolos en una de las esquinas de la calle cuando intentaban darse a la fuga, para lo que contaron con la colaboración de la Guardia Civil, tras lo cual fueron puestos a disposición judicial.
Se da la circunstancia que uno de ellos, C.P., había sido detenido tres días antes por su implicación en un robo que se produjo en un domicilio particular. Una vecina avisó a la policía de haber visto a un sospechoso con una cámara de vídeo, que se demostró posteriormente que había sido robada en dicho domicilio días anteriores. Al parecer, en el momento de la detención el sospechoso se dirigía a vender la mercancía. Igualmente fue puesto a disposición judicial. Lo que ahora todos se preguntan es ¿cómo es posible que estuviera a los tres días perpetrando otro delito?