El arte urbano como terapia, este es el resultado de la exposición Urbanart San Roque un proyecto de Antoni Gabarre, que con el patrocinio de la refinería Cepsa del Campo de Gibraltar ha traído hasta el campus de La Rábida de la Universidad Internacional de Andalucía 30 fotografías de otros tantos jóvenes, que muestran sus obras de arte urbano.
Hasta el próximo 15 de enero se puede visitar esta exposición en horario de mañana y tarde en la hemeroteca de la UNIA. En el acto de presentación han estado presentes el propio artista y la vicerrectora del campus de La Rábida, Yolanda Pelayo.
Antoni Gabarre es, entre otras muchas cosas, educador social y ha trabajo en lugares tan dispares como Bosnia, Irlanda del Norte, en cárceles, etc. Siempre en lugares con problemas de integración, en ambos casos de integración entre religiones, musulmana y católica y católica y protestante. “Mi trabajo siempre ha estado con las personas con problemas de integración. Esta exposición es el resultado de dos años de trabajo del 2010 al 2012. La mayoría de los entre 80 y 90 jóvenes que participan proceden de familias desestructuradas y con problemas psicosociales”.
Para este polifacético artista escultor, muralista, publicista “el muralismo y el grafiti son herramientas de intervención con jóvenes y como prevención del vandalismo”, declara. Estos programas se diseñan y ponen en marcha en coordinación con entidades públicas y privadas, y tienen como objetivos principales, sensibilizar a la ciudadanía en general y a los jóvenes en particular sobre el respeto al entorno urbano, favorecer la mejora de la estética urbana, la integración social de los jóvenes a los que su situación personal les lleva a la realización de actos vandálicos y favorecer el desarrollo creativo de los jóvenes creadores urbanos dotándolos de recursos y oportunidades.
Esta exposición que trae hasta La Rábida forma parte de la recuperación de espacios degradados y mejora del entorno del Campo de Gibraltar, concretamente de San Roque. “Donde se hacen los dibujos -algunos de verdaderos artistas,-antes había desolación y ahora la gente pasea y hace fotos. Se trata en definitiva en trabajar el arte en la calle es apostar por la prevención, la integración y la participación de estos jóvenes”, resume el Gabarre.
Anteriormente se ha podido ver en Madrid, Jerez y por supuesto en el Campo de Gibraltar en todos estos lugares se trata dar a conocer lo que los jóvenes pueden hacer “cuando se les fomenta sus habilidades y sus inquietudes. Algunos de ellos acaban dedicándose profesionalmente a la pintura y acaban formándose en la Facultad de Bellas Artes de Sevilla”.
En cuanto a los problemas que estos jóvenes artistas tienen con algunos ayuntamientos manifestó que “el ayuntamiento de Madrid gasta más de 6 millones de euros en limpiar los grafitis y nada en arte urbano”, concluye.