Extrabajadores de Mancomunidad Cuenca Minera estudian emprender un calendario de movilizaciones, entre las que no se descartan encierros en las sedes de los Ayuntamientos que no afronten la parte que les corresponde del pago de sus salarios, si en el plazo de una semana no se les concreta una fecha definitiva para el cobro de los importes pendientes.
En total, son once los afectados por el impago de la entidad, que rescindió los contratos el 30 de noviembre de 2012 sin haber abonado sus nóminas desde junio de ese mismo año. Entre ellos, se encuentra además un trabajador al que la deuda alcanza hasta marzo de 2013. Sumando salarios e indemnizaciones, la entidad debe a sus empleados un total de 350.000 euros, al que tienen que hacer frente los Ayuntamientos integrantes en la misma y que son Berrocal, El Campillo, Minas de Riotinto, Zalamea la Real, Nerva, Campofrío y la Granada de Riotinto.
Los extrabajadores afectados quieren expresar su malestar por esta situación, ya que llevan en el paro un año instando al pago de lo adeudado, y ma? aún cuando aseguran, “los alcaldes se comprometieron en el pleno del 22 de febrero de 2013 a efectuar el pago de la totalidad de la deuda de los trabajadores cuando los Ayuntamientos cobraran la cuantía que les debía Giahsa, ingreso que dicha empresa ya efectuó el pasado mes de noviembre”.
Asimismo, añaden que este pleno vino a ratificar lo que ya en una primera toma de contacto en noviembre de 2012 todos los alcaldes de la zona habían acordado y que era abonar una parte de las nóminas con la aportación que los ayuntamientos debían hacer a la entidad en el periodo 2013-2014 y el resto, con el cobro de Giahsa, decisión que fue corroborada por unanimidad en una posterior reunión el 25 de septiembre de 2013.
“Indignados” por la actitud del alcalde de El Campillo
Sin embargo, los extrabajadores aseguran sentirse “indignados” con la actitud del alcalde de El Campillo, el andalucista Francisco Javier Cuaresma, que en la última reunión celebrada el pasado 2 de octubre “se retractó de su compromiso y abandonó la sala tras declarar que no sabía lo que podía poner hasta principios de año ya que tenía que atender otros compromisos antes que el pago a los trabajadores”.
Los afectados critican que el alcalde de El Campillo “no fuera capaz de dar una justificación razonable a la falta de pago y más aún teniendo en cuenta que los proveedores han tenido ya tres planes de pago y los trabajadores ninguna, cuando las deudas de los trabajadores son prioritarias”.
Asimismo, se muestran preocupados porque la entidad no tiene interventor desde marzo de 2013, lo que agrava y dificulta aún más la situación para el cobro de sus nóminas.
Los extrabajadores exigen que los responsables municipales cumplan con los compromisos adquiridos con ellos y abonen los salarios que se les adeudan desde hace un año. De lo contrario, pondrán en marcha un calendario de movilizaciones en el que no se descarta el encierro indefinido en las sedes de los Ayuntamientos que no cumplan con lo acordado en pleno.