La Autoridad Portuaria de Huelva ha iniciado hoy las obras en el muelle de Levante norte para construir una nueva lonja y llevar a cabo un proceso de remodelación de este espacio para convertirlo en un lugar de servicios, turismo y ocio abierto a la ciudad, enmarcado en el objetivo de continuar acercando el Puerto a la sociedad.
La presidenta de la Autoridad Portuaria de Huelva, Manuela de Paz, que ha estado presente hoy en el inicio de la demolición de las naves de exportadores, ha asegurado que este paso constituye un hito histórico para la ciudad y la provincia. De Paz ha agregado que una vez estén concluidas las obras, el muelle de Levante estará integrado en la ciudad, dado que además de la nueva lonja se construirá en una segunda fase una zona de ocio con superficies de restauración, comercial y un mercado gourmet, que contribuirán al acercamiento del Puerto a la sociedad y al impulso de distintas actividades económicas que generen un valor añadido para Huelva y su provincia.
Por su parte, el presidente de la Diputación y del Patronato de Turismo, que también ha querido estar presente en este momento debido a la transcendencia que para el turismo tendrá este proyecto, ha destacado la importancia de una obra “que va a cambiar la imagen y la fisonomía de Huelva”, convirtiendo a la capital en la referencia de una provincia que cuenta con atractivos turísticos “enormes, importantísimos y reconocidos”. Caraballo, que se ha referido a la ría como la “giralda natural” de Huelva, ha insistido en que la capital tiene que trabajar para ejercer ese liderazgo e invertir en proyectos “que tiene paralizados como el Ensanche Sur o Isla Chica”.
Por su parte, el director del Puerto de Huelva, Pedro García, ha explicado la evolución que seguirán las obras.
En el acto también ha estado presente el arquitecto José Álvarez Checa, autor de proyecto de remodelación de los servicios pesqueros y reordenación urbanística norte del muelle de Levante tras ganar un concurso de ideas convocado por el Puerto de Huelva.
La primera fase de la obra comprende la construcción de una nueva lonja y urbanización aledaña, un proyecto que se está licitando y cuyo presupuesto estimado es de siete millones de euros.
La segunda fase consiste en la edificación de tres inmuebles dedicados a restauración, zona comercial y mercado gourmet, con un presupuesto estimado de cinco millones de euros.
Para ello, se ha empezado desde hoy con el derribo de tres módulos de exportadores de mariscos situados más próximos al centro comercial Aqualón Puerto y de una sola parte de la lonja, debido a que ésta continuará funcionando durante las obras. Estas actuaciones serán acometidas por la empresa constructora Ceinsa y el periodo de ejecución de las obras es de tres meses, con un presupuesto cercano a los 300.000 euros.
La empresa pública Mercados Centrales de Abastecimiento SA (Mercasa) explotará la futura nueva lonja y la zona comercial y de ocio.
Esta remodelación urbanística del muelle de Levante norte se llevará a cabo en un espacio de 35.000 metros cuadrados. De ellos, 10.100 metros cuadrados albergarán la superficie de la lonja y zonas aledañas y el resto, 24.900 metros cuadrados, acogerán los tres edificios de ocio y restauración.
En relación a la nueva lonja, dispondrá de una planta baja con 3.800 metros cuadrados, con una superficie para descarga y manipulación, además de albergar cámaras frigoríficas, almacén, subasta, aseos, mercado mayorista, oficinas, bar y vestuarios. La planta alta, con 2.500 metros cuadrados, tendrá zona para subasta, oficinas, cafetería/restaurante, laboratorios, tienda gourmet y tres salas de museo. Y el castillete contará con 97 metros cuadrados. Asimismo, la lonja comprende un sistema de puntos de observación en la planta alta dotado de cristaleras, que permite contemplar el recinto de exposición de pescado a subastar, la entrada del pescado desde la ría y el mercado de mayoristas.
Este edificio estará integrado en un entorno conformado por paseos, bulevares y zonas de circulación internas. La lonja dispondrá de 120 plazas de aparcamientos.
El proyecto apuesta por el desmontaje parcial de la valla con grandes aperturas de forma, que permiten eliminar el concepto de recinto cerrado y a la vez conservar la imagen histórica del Puerto de Huelva en torno a la valla.
En cuanto a la segunda fase del proyecto, contempla la ejecución de tres edificios para ocio y comercio. Un edificio estará destinado a restauración, con 1100 metros cuadrados de planta baja y 750 metros de planta alta. Por su parte, el edificio dedicado a zona comercial contará con 1100 metros cuadrados en la planta baja y 750 metros en la planta alta. Completa la actuación un tercer inmueble para mercado gourmet, con 1200 metros en la planta baja y 665 metros en la planta alta. Todos estos edificios estarán dotados de un total de 200 aparcamientos.