La Dirección General de Tráfico pondrá en marcha este lunes, 10 de marzo, una nueva campaña de vigilancia y concienciación del uso del cinturón de seguridad y sistemas de retención infantil (SRI) que se extenderá hasta el día 16.
A través de esta campaña, la DGT pretende incidir en la utilización del cinturón y SRI como “el sistema de seguridad vial más sencillo y rentable en todo tipo de vías y trayectos”, además de ser imprescindibles para que el airbag pueda ser totalmente eficaz.
Aunque el uso del cinturón de seguridad se ha incrementado notablemente en los últimos años, su utilización no está aún generalizada y todavía existen graves lagunas. Así, por ejemplo, la proporción de conductores y pasajeros que llevaban puesto el cinturón, o niños con SRI, al circular por vías interurbanas es significativamente superior al observado en vías urbanas. Igualmente, el uso de los cinturones en los asientos delanteros es mayor que en los traseros.
En Huelva, de los 20 conductores fallecidos en vías interurbanas durante 2013, 6 –el 30%– no llevaban puesto el cinturón de seguridad en el momento del accidente. Asimismo, de los cuatro pasajeros fallecidos el año pasado, uno de ellos –el 25%– tampoco llevaba el cinturón. Ante esta cifra de víctimas mortales en accidentes de carretera durante 2013, resulta imprescindible remarcar que el uso del cinturón reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de siniestro.
SRI, el mejor seguro de vida del niño
Pero si el uso del cinturón de seguridad es imprescindible para los adultos, también lo es para los menores, ya que los sistemas de retención infantil son diseñados para proteger a los bebes y a los niños en caso de colisión, parada brusca, maniobra de evasión o apertura de puerta cuando el vehículo está en movimiento.
Un niño sin sujeción multiplica por cinco las posibilidades de sufrir lesiones mortales o graves. Además, nueve de cada diez lesiones infantiles graves o mortales se habrían evitado si se hubieran utilizado sistemas de retención.
Además, no se debe llevar nunca a un niño en brazos, ni utilizar el cinturón de seguridad del adulto para protegerle.
La Universidad Politécnica de Madrid, en el informe sobre buenos y malos usos de las sillitas infantiles en los accidentes de tráfico ofrece las siguientes recomendaciones:
Situar la sillita en la plaza trasera central.
Asegurarse de anclar correctamente la sillita con el cinturón del coche o con el sistema ISOFIX. Una silla mal colocada multiplica por cuatro el riesgo de muerte infantil en accidente de tráfico.
Desactivar siempre el airbag al colocar la sillita portabebés en el asiento del copiloto.
No dejar nunca holgado el arnés de seguridad de la sillita, ya que si no está bien ajustado aumenta el riesgo de que el menor sufra daños severos.
Ajustar las correas de la sillita a la estatura del niño, sin que queden por encima o debajo del los hombros, para evitar lesiones.
Ser conscientes de que el cambio de una sillita a otra depende del peso del menor, no de su edad
Utilizar siempre los sistemas de retención infantil hasta que el niño supere los 135 cm de estatura.
Por último, recordar que debido a la importancia que tiene el uso de los dispositivos de retención en la seguridad de los ocupantes de los vehículos, no hacer uso del mismo supone cometer una infracción grave, que lleva aparejada una multa de 200 euros y la retirada de 3 puntos del permiso de conducir, en el caso de que se trate del conductor.