1 raya mediana
1/2 hígado de raya
2 rebanadas de pan
1 vaso aceite de oliva
1/2 vaso de vinagre
2 hojas de laurel
5 dientes de ajo
1 cucharadita de comino
1 cuchara sopera de pimentón dulce
Sal
Preparación:
– Tomamos las dos rebanadas de pan y las pasamos por el vinagre hasta que se queden esponjosas. Posteriormente, las freímos con un poco de aceite de oliva y apartamos.
– En un mortero majaremos los dientes de ajo y añadiremos el comino y un poco de sal gorda. Cuando veamos que está bien majado, iremos añadiendo el pan y lo mezclaremos todo junto. A continuación apartaremos la mezcla.
– En el aceite de freír el pan pondremos el hígado para freírlo, acompañado de unos cuantos de ajos machacados y el laurel. Cuando el hígado esté en su punto, añadiremos la mezcla anterior y le agregaremos el pimentón dulce.
– En un tarro aparte pondremos agua a hervir e introduciremos los trozos de raya para que se vayan escaldando (más o menos 3 segundos). Cuando veamos que la piel se puede separa con facilidad, será el momento de sacar la raya y ponerla en una cazuela junto con el contenido de la mezcla anterior.
– Por último, tendremos que ir cociéndola a fuego lento para que la mezcla vaya espesando. Si queremos añadir al final unas gambitas peladas y unos guisantes con perejil picado, le dará un toque especial a nuestro plato.