El entrenador del Córdoba CF, Albert ‘Chapi’ Ferrer, se ha referido hoy al duelo andaluz que protagonizarán este sábado en Huelva, un choque en el que espera a un Recreativo que «irá a por el partido desde el primer minuto porque Sergi (su técnico) es ambicioso». Ferrer ha indicado en una conferencia de prensa que el ‘Decano’ «intentará mandar» en el encuentro porque tiene jugadores para ello ya que en su opinión son «muy peloteros para marcar el ritmo del partido y así tener mucha combinación».
«Nosotros fuera nos encontramos cómodos», ha recordado Ferrer tras las cuatro últimas salidas saldadas con victorias, así que espera un partido «muy disputado» en el que «cada uno intentará ganar con sus armas». El preparador del equipo blanquiverde ha reconocido que esta semana ya ha hablado con Sergi Barjuan como lo hizo en su día con otro exbarcelonista como Eusebio Sacristán cuando se midieron al filial azulgrana. Ferrer, en este sentido, ha bromeado al señalar que «no se hizo ningún pacto» pese a la amistad que les une, porque además de ser los dos laterales del FC Barcelona de principios de siglo, son vecinos cuando vivían en la capital catalana.
«Pero en los noventa minutos del partido dejaremos de ser amigos y lo volveremos a ser al final», ha dicho Ferrer consciente de lo mucho que hay en juego en este partido, ya que con una victoria y la combinación de otros resultados «se podría estar matemáticamente en la fase de ascenso, pero es igual para el Recre». Por ello Ferrer ha querido insistir que no sólo la racha es «buena» para el Córdoba, porque el Recreativo «también llega en un buen momento», ya que la remontada en Las Palmas les hará estar «moralmente muy bien».
Ferrer ha asegurado que afrontan el partido «sin presión», sino que el vestuario piensa en que esta situación es «un premio al trabajo», por lo que sólo «firmaría llegar clasificados a la última jornada» para la fase de ascenso, dado que prefiere «no pensar» en el partido ante el Mallorca de la última jornada.
El técnico del Córdoba también ha tenido palabras para el desencuentro entre las directivas por los elevados precios fijados para la afición visitante y ha recordado que en Inglaterra, cuando él jugaba en el Chelsea «se desplazaban más de dos mil aficionados a Manchester y allí les daban la grada preferencial».
«Me sabe mal y me parece una pena esta situación», ha añadido Ferrer, ya que en su opinión es «absurdo» porque el Recre «no va a jugar ni mejor ni peor», cuando el fútbol debe ser «una fiesta en la que el público crea el ambiente y una atmósfera bonita», ya que sin aficiones el fútbol «no tendría sentido».