El Taller Municipal de Teatro de Moguer sigue sumando éxitos tras su destacada participación el pasado sábado en el XXX Festival Castillo de Niebla, uno de los acontecimientos culturales más importantes de Andalucía en el que se rinde tributo a las artes escénicas. Representaron la farsa infantil ‘La cabeza del dragón’ de Valle-Inclán.
Bajo la dirección de Juan Luis Ferrer, el grupo de tarde de la asociación de mujeres Zenobia de este Taller Municipal, superó con nota el reto de dar vida a un texto clásico de uno de los dramaturgos españoles más influyentes de nuestra literatura, como es Ramón María del Valle-Inclán, y de hacerlo además en un escenario por el que han pasado artistas de la talla de José Sacristán, Carmen Machi, Tristán Ulloa o Víctor Ullate.
Su participación en el XXX Festival de Teatro y Danza Castillo de Niebla se enmarca en el programa ‘A escena!’, una apuesta del área de Cultura de la Diputación Provincial de Huelva para proyectar el importante trabajo que se realiza en las escuelas de teatro municipales. Junto al grupo de la ciudad del Tinto, fueron seleccionados para participar en este prestigioso certamen los talleres de Bonares y de San Juan del Puerto.
Las once mujeres y los dos hombres de Moguer que afrontaron este desafío interpretativo, entre ellos el propio director de la obra, representaron en la localidad iliplense un fragmento del cuento infantil ‘La Cabeza del Dragón’, un libreto con grandes dosis de ironía, en el que subyace una crítica demoledora a la época en la que vivió el escritor de la generación del 98 Ramón María del Valle-Inclán. Príncipes, princesas, dragones, duendes o bufones son algunos de los personajes que llenaron de color esta historia escrita para niños e inspirada en escenarios fantásticos, bosques y castillos.
Es importante destacar el protagonismo que adquiere en esta función el atrezzo, un elemento imprescindible que ha tomado forma gracias a la labor creativa de los moguereños Abraham Cuéllar, Gloria Ortega y Juani Ruiz, junto al grafitero alicantino Mr Chapú.
Para esta cita con las artes escénicas en la fortaleza medieval de Niebla, Juan Luis Ferrer escribió para la ocasión una pieza introductoria que enmarcó una actuación brillante y muy divertida que cautivó a las más de 500 personas que asistieron al patio de los Guzmanes para disfrutar de la cultura en sentido puro.