Las trabajadoras de la dependencia en Isla Cristina continúan viviendo una situación “extremadamente grave después de que el Ayuntamiento de la localidad no haya abonado el dinero necesario para que las empresas puedan hacer frente a sus nóminas de los meses de octubre y noviembre, con lo cual están condenando a estas mujeres a un futuro más que incierto durante las próximas Navidades”, ha explicado Carmen Marchena de CCOO.
En este sentido, la sindicalista ha explicado que “la situación de estas trabajadoras hace ya mucho tiempo que es insostenible sin que las Administraciones, ni la autonómica ni la municipal hagan nada para alcanzar una solución viable y a largo plazo”.
Así Marchena ha cargado por un lado “contra la Junta de Andalucía, que se ha comprometido públicamente en multitud de ocasiones a mantener el sistema de Dependencia, pero se está demostrando que son palabras que se lleva el viento ya que en la realidad la Junta no está pagando lo que le corresponde y por lo tanto está impidiendo el correcto desarrollo de este servicio básico, el cuarto pilar del Estado de Bienestar”.
Pero más allá de la Junta, desde CCOO se ha acusado al Ayuntamiento de Isla Cristina, y a su alcaldesa como máxima representante de “carecer de cualquier tipo de sentimientos y responsabilidad social con este tema ya que ni siquiera a consentido que la Diputación colabore en la resolución del problema aludiendo como excusa que no quiere que se le detraiga ni un céntimo del Ayuntamiento para destinarlo a la Dependencia”.
Por todo ello, desde el sindicato se ha recordado que “la mayoría de los puestos de trabajo que se crean en el sistema de Dependencia son empleos femeninos, uno de los colectivos con mayores dificultades para conseguir un puesto de trabajo en la situación actual”, por lo que ha exigido al consistorio isleño que “cumpla con sus obligaciones y responsabilidades tanto con estas trabajadoras como con las personas dependientes a quienes prestan su servicio”.
Finalmente, Marchena ha sido contundente al afirmar que “no hay derecho a que los políticos sigan engañando a las mujeres mintiendo con fines electorales, cuando las mujeres tienen que acudir al banco de alimentos para poder llegar el estómago de sus hijos”.