Sin duda alguna, estas dos Peñas de la Hermandad del Rocío de Isla Cristina demostraron, una vez más, que siempre están con su Hermandad y por ello, a pesar de la fría noche, ante el Simpecado, cantaron la salve dirigidos por José Antonio Monclova. Una salve, de cuya letra y música él es el autor, y que, poco a poco, se está convirtiendo en el santo y seña de la hermandad isleña porque ha sido capaz de reunir en pocas palabras, el profundo sentimiento y devoción que la Hermandad y, en definitiva, el pueblo entero siente por la Virgen del Rocío.
Y alegraron la noche, sin duda, con una intenso popurrí de los villancicos más populares con el «quejío» de las rumbas consiguiendo con ello que todos los presentes les siguieran al compás.
Un ejemplo hermoso, sin duda, el de estas dos Peñas de cantarle al Simpecado de su Hermandad. Un ejemplo que sería ideal lo adoptaran otras muchas que conforman la caravana todos los años de nuestra querida Hermandad cuando se echa a los caminos para encontrarse con Ella.