La consejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, María Jesús Serrano, ha reivindicado el Plan Especial de Ordenación de las Zonas de Regadío Ubicadas al Norte de la Corona Forestal de Doñana, un documento que ha costado «muchísimo trabajo» acometer en la medida en que también hay que conciliar «muchísimos intereses», como instrumento de utilidad a la hora de acometer la regulación para los pozos de la zona.
En declaraciones a los periodistas en Sevilla, Serrano ha indicado al respecto que «respeta» las afirmaciones de la organización conservacionista WWF –que recientemente aseguraba que el también denominado ‘plan de la fresa’ «no puede crear falsas expectativas de legalidad a los agricultores, porque no legaliza nada»–, si bien «en este caso no las compartimos».
Para la consejera, el plan ha sido hecho con «consenso» y «participación», logrando un marco desde el «respeto» a la normativa de aguas y la ley forestal andaluza en relación a los regadíos en Doñana, que, a su juicio, «debe seguir siendo un espacio de conservación y protección, pero donde, a la vez, se facilite el desarrollo socioeconómico sostenible para todos los habitantes del territorio».