Izquierda Unida de Huelva reinicia este miércoles, en el barrio del Molino de la Vega, su campaña de rendición de cuentas ante la ciudadanía de Huelva ante la convocatoria electoral del próximo mes de mayo. El portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Huelva, Pedro Jiménez, el también concejal de IU, Juan Manuel Arazola, y más integrantes del Consejo Local han participado hoy en un reparto informativo en la barriada del Molino para dar a conocer la celebración de una nueva Asamblea de Vecinos y Vecinas Abierta que tendrá lugar mañana jueves a las siete de la tarde en la sede de la Asociación de Vecinos Nuevo Molino, ubicada en la calle Fuenteheridos, junto al Centro de Salud de esta barriada.
Hasta ahora, Izquierda Unida ha celebrado varias convocatorias abiertas en Huelva dentro de su iniciativa para ‘Construir una Ciudad mejor’. El primer encuentro, que sirvió para exponer el trabajo realizado en el Ayuntamiento en el presente mandato, se celebró en el salón de actos de la Universidad de Huelva en La Merced, el pasado mes de noviembre.
Posteriormente, en los actos celebrados en las barriadas de El Higueral, La Hispanidad y Verdeluz el Grupo Municipal de IU ha constatado la “situación de abandono” que viven los barrios de la capital y “los enormes esfuerzos que hacen los vecinos para llegar a fin de mes, el que llega, debido al paro, la precariedad laboral y las altísimas tasas e impuestos municipales de agua y basura e IBI a las que tienen que hacer frente para costear los 20 años de mala gestión del equipo de Gobierno del Partido Popular que encabeza el actual alcalde Pedro Rodríguez”.
Las asambleas abiertas convocadas por Izquierda Unida se han convertido en un foro de debate e ideas aportadas por los asistentes para que IU las incorpore a su programa electoral y las aplique en el Consistorio en caso de que las urnas le concedan responsabilidades de Gobierno.
A juicio de Pedro Jiménez, queda claro que “la gente quiere convertir sus problemas diarios en problemas políticos para que el Ayuntamiento haga frente a ellos y busque soluciones”.
La pérdida de empleo, la falta de salidas para los jóvenes, las carencias de servicios básicos como la limpieza urbana, los desahucios, la pérdida del hogar, el abandono a su suerte de los vecinos ante la gravedad de la situación económica, la incomunicación debido al mal funcionamiento del transporte urbano han convertido la periferia en “simples barrios dormitorios”, rodeados de un desierto a todos los niveles, sobre todo cultural y de orientación para jóvenes y personas mayores.