Izquierda Unida pedirá a la Comisión Europea y al Gobierno de España un pronunciamiento definitivo sobre el proyecto de almacenamiento que Gas Natural pretende llevar a cabo en Doñana que incluya el análisis completo del planeamiento que la empresa ha troceado hasta en cuatro partes para conseguir una Declaración de Impacto Ambiental más laxa y con menos requisitos y que contemple la garantía de la ausencia de riesgos sísmicos para los pueblos del entorno. Así lo anunciaron este martes en Huelva la eurodiputada del Grupo de Izquierda Unida, Paloma López, y el coordinador provincial, Pedro Jiménez.
Jiménez ha pedido a la Junta de Andalucía que mantenga su negativa al proyecto de almacén de Gas Natural en el Parque Nacional de Doñana y exige al Gobierno central que la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) deje claro que no existirán riesgos sísmicos en la zona, además de que cumpla la normativa europea y analice el proyecto de Gas Natural en su conjunto y no convertido en cuatro trozos para evitar tener que pronunciarse sobre los riesgos de terremotos y otras afecciones tanto al medio ambiente como a los municipios vecinos del Condado y la Costa.
Pedro Jiménez asegura que Izquierda Unida quiere evitar que “en los municipios de la comarca de Doñana acabe sucediendo lo mismo que con el proyecto Castor impulsado por la empresa ACS en Castellón, que provocó decenas de movimientos sísmicos en toda la comarca donde también se desarrollaba el almacenaje de gas en el subsuelo”, además de la exigencia de indemnizaciones millonarias. Lo mismo que quiere hacer en el caso de Doñana Gas Natural, dice Jiménez, con su amenaza de reclamar a la Junta el pago de 358 millones de euros si se paraliza la extracción y posterior almacenamiento de gas.
La eurodiputada Paloma López mantendrá hoy en Almonte un encuentro con asociaciones ciudadanas y cargos públicos de IU para abordar las necesidades y reclamaciones de la comarca del Condado, en lo relativo al proyecto de Gas Natural y en materia de agricultura y energías renovables. López ha avanzado que del encuentro con los sectores del Condado saldrán propuestas encaminadas, sobre todo, a la generación de empleo partiendo de modelos industriales y agrícolas que tengan relación con las energías renovables, la agricultura extensiva aprovechando el aspecto ecológico de un área como Doñana.
Paloma López subraya que hasta ahora la Comisión no ha evaluado los riesgos sísmicos del proyecto de Gas Natural, “por eso queremos que se pronuncie sobre el proyecto al completo y no troceado”. Y añade que la Comisión ya ha reconocido que la evaluación ambiental existente es insuficiente.
Desde Izquierda Unida se reitera su “total rechazo al proyecto de Gas Natural” y la necesidad de que la Junta lo desautorice finalmente a pesar de las amenazas de la empresa y su pretensión de exigir una indemnización.
A juicio de Pedro Jiménez, “Doñana no puede ser un espacio compatible con este tipo de actividades industriales” y recuerda que la Unión Europea ha gastado cientos de millones de euros, a través de los planes de desarrollo sostenible, en la conservación del Parque y en compensaciones económicas para la comarca como para ahora poner en riesgo todo ese trabajo y mirar para otro lado mientras se ponen en marcha proyectos tan agresivos.
El coordinador provincial subraya que Izquierda Unida ha llevado al Parlamento Andaluz su inquietud por el proyecto gasista preguntando al Consejo de Gobierno cuál sería su posición final ante la demanda planteada por Gas Natural de exigir una indemnización de 358 millones de euros y también al Congreso de los Diputados. Además de esta pregunta parlamentaria en el ámbito andaluz, la eurodiputada de Izquierda Unida, Paloma López, preguntó a la Comisión Europea si conocía los permisos que el Gobierno del PP otorgó en 2013 a Gas Natural para extraer y almacenar gas del subsuelo del Parque y si cree que el proyecto se ajusta a la legislación comunitaria.
Jiménez cree necesario “poner en valor la marca Doñana para potenciar los productos agrícolas y ganaderos de la comarca, no poniéndolos en riesgos con proyectos claramente insostenibles como éste”
Las dudas de Izquierda Unida se basan en que Gas Natural ha troceado el proyecto en cuatro declaraciones de impacto ambiental con el objetivo de desarrollar un almacén de gas subterráneo que conlleva 14 nuevos pozos exploratorios y 20 kilómetros nuevos de gasoductos, lo que a juicio de esta organización es “rotundamente inaceptable”.
