Las víctimas de bebés robados en Andalucía van a concentrarse este sábado, coincidiendo con la celebración del 28-F, en Sevilla, donde van a realizar una manifestación que irá desde el Parlamento andaluz hasta la plaza de San Francisco. La protesta comenzará a las 11.15 horas.

Andalucía es la comunidad autónoma más castigada por la trama de robo de bebés, con unos 50.000 niños y niñas secuestradas en 34 casas cuna, clínicas, hospitales y residencias de las ocho provincias mediante engaño entre 1950 y 1990; niños que hoy día son andaluces con identidad falsa, según han calculado las asociaciones de afectados.

A ellos hay que añadir los anteriormente retirados a sus familias por el franquismo en Andalucía como medida de represión política, unos 8.000, igualmente hoy personas mayores que siguen separadas de sus verdaderas familias.

Los afectados han presentado en las ocho provincias andaluzas más de un millar de denuncias en los juzgados, pero ni una de ellas ha prosperado. Al contrario, están sufriendo su archivo masivo por la supuesta falta de pruebas o por el argumento peregrino de la prescripción del delito, cuando es consabido que la desaparición forzada no prescribe mientras se mantenga la situación de secuestro, y mucho menos prescriben los delitos de lesa humanidad, tal como han sido declarados estos mismos hechos en países como Argentina.

Los tratados internacionales sobre derechos humanos firmados por España exigen a los poderes públicos que se hagan cargo de reintegrar a los desaparecidos a sus verdaderas familias, haciendo así posible el reencuentro familiar. Sin embargo, los afectados andaluces «nos estamos encontrando un veradero bloqueo a que se nos devuelva la dignidad, porque ni la Justicia, ni el Estado español, ni el Gobierno de la Junta de Andalucía, ni el Parlamento andaluz, ni el Defensor del Pueblo, ni las Diputaciones Provincias ni la jerarquía eclesiástica…, ninguna institución en definitiva quiere intervenir decididamente.