El candidato socialista a la Alcaldía de la capital onubense, Gabriel Cruz, se compromete a negociar con los trabajadores municipales la recuperación de los derechos perdidos, integrados en el Reglamento de Funcionarios, suspendido en su amplia mayoría por las políticas de ajuste que se tomaron desde 2012, debido a la bancarrota económica del Consistorio. Así lo ha asegurado Cruz tras mantener una reunión con la junta de personal del Consistorio, en la que los representantes de los trabajadores manifestaron su actitud constructiva para abordar esta situación.
En este sentido, el dirigente socialista se pone la tarea de atender las demandas de los trabajadores municipales, quienes “han pagado con sus derechos sociales y económicos parte de la deuda de este Ayuntamiento”. “Es de justicia que, tras su sacrificio, se les devuelvan sus comisiones según lo pactemos con ellos en los espacios que hay fijados para estas decisiones, y vayan retomando sus derechos perdidos de la forma que se establezca”.
Otra de las tareas que se impone el alcaldable relacionada con los funcionarios es la reactivación “inmediata” del derecho que tienen los trabajadores municipales de promocionar profesionalmente. Para Cruz, la promoción interna y la carrera profesional de los empleados públicos “es un derecho irrenunciable que, lamentablemente, se ha visto paralizado durante años por el alcalde de Huelva y su equipo de gobierno”, sin embargo, “vamos a recuperarlos y, para ello, resulta indispensable analizar la plantilla actual, decidir hacia dónde queremos ir y establecer una ordenación del personal de acuerdo a las necesidades del servicio que se presta, asegurando la estabilidad del empleo de todo el personal municipal”.
Por su parte, los miembros de la junta de personal manifestaron su preocupación por la crítica situación económica del Ayuntamiento de Huelva, a lo que Cruz respondió que a partir de mayo “cambiaría la situación gracias a una gestión rigurosa y con sentido común que desempeñaría un gobierno socialista”. Además, se comprometió a “consensuar y considerar con los representantes de los trabajadores municipales todo aquello que les incumba y afecte. Nunca tomaremos decisiones unilaterales ni de espaldas a la plantilla municipal”.