Un juzgado de Ayamonte ha absuelto a un agente de la Guardia Civil y a un abogado, acusados, respectivamente, de una falta de maltrato físico y de una falta de desobediencia a un agente del orden, al considerar que los hechos han prescrito.

El juez, a petición de Fiscalía y del letrado del guardia civil, en presencia de los acusados, ha mantenido que ambas faltas están prescritas al haber transcurrido diez meses sin actuación procesal, cuando la ley indica un máximo de seis.

Por ello, ha acordado la absolución de los dos acusados, sin entrar al fondo de las faltas, según han informado a Europa Press desde el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), no obstante la sentencia puede ser recurrida en el plazo de cinco días.

Los hechos se remontan al 31 de diciembre de 2013 cuando, según informó en aquellas fechas la Asociación de Abogados del Turno de Oficio de Huelva (ATOH) y la Asociación de Abogados del Partido Judicial de Ayamonte (Huelva), todo ocurrió cuando el letrado iba a asistir a un detenido, el cual, cuando llegó el abogado al cuartel de la Guardia Civil, «aún no estaba allí por no disponer el mismo de calabozos».

Desde el colegio criticaron que, en lugar de permitirle que esperara en una sala, «se le dejó en la puerta sufriendo el frío de la mañana, motivo por el que protestó y terminó siendo agredido por el propio capitán».

No obstante, en un comunicado ese mismo día, la Guardia Civil aseguró que «no había existido ningún tipo de agresión sobre esta persona». También indicó que el abogado «ha planteado diversos problemas para efectuar la asistencia, que finalmente no se produjo».