Los delegados de prevención de riesgos laborales del Ayuntamiento de Cartaya llevan toda la legislatura solicitando la constitución del comité de seguridad y salud. Sin embargo, después de casi cuatro años, el alcalde del municipio, el independiente Juan Miguel Polo, sigue “sin dar la cara” al no facilitar ningún tipo de información al respecto. Así lo ha denunciado el sindicato CSIF que asegura que la corporación no ha realizado los reconocimientos médicos preceptivos a sus empleados públicos ni ha renovado los servicios de prevención con ninguna empresa externa; tampoco ha informado de que haya un plan de autoprotección en el edificio de la Policía Local.
Por todo ello, la central sindical asegura que el primer edil “sigue mintiendo e incumpliendo la ley” en relación a la normativa de prevención de riesgos laborales y a las deficiencias en las dotaciones de la Policía Local. En este sentido, CSIF recuerda que el reconocimiento médico de un policía ronda los 30 euros al año, es decir, 900 euros al año en total para este colectivo en el consistorio cartayero. “Esto vuelve a demostrar que no es una cuestión de dinero, que en este conflicto laboral que mantiene la Policía Local con la corporación desde hace varios años no hay un trasfondo económico y sí una cuestión de dejadez, abandono y menosprecio del alcalde de Cartaya a los miembros de la Policía Local y su pueblo en materia de seguridad”.
En cuanto a los recursos humanos, CSIF indica que la Policía Local comenzó la legislatura en 2011 con 30 agentes y a día de hoy se encuentra con 23 efectivos a turno. Este detrimento se explica por las bajas en la plantilla y por la jubilación por incapacidad permanente de un agente como consecuencia del ictus que sufrió hace unos meses; todo ello hace imposible mantener el mínimo de una pareja para cubrir Cartaya, El Rompido y Nuevo Portil. “Es totalmente falso, tal y como afirma el alcalde, que haya seis y siete agentes de la Policía Local prestando servicio en la vía pública”.
Además, durante prácticamente cuatro años, “se han tenido que vivir situaciones de carencia y deficiencia de recursos humanos, materiales y técnicos que han hecho imposible por parte de los agentes policiales prestar un servicio básico y digno a los ciudadanos”. Y es que, en opinión de esta central sindical, “abandonar a la Policía Local es abandonar a los vecinos, desprestigiar a los agentes es desprestigiar al ciudadano y no invertir en la Policía es dejar de lado la seguridad de la localidad”.
Desde la organización lamentan que el primer edil en vez de solucionar estas deficiencias “saque a la palestra una y otra vez a los agentes y sus familiares sin darles un respiro, utilizando el pleno y los medios para dedicarse a desacreditar y atacar a sus empleados públicos y a los representantes sindicales con falsas acusaciones”.
Reglamentos
Por otra parte, pese a la propuesta del concejal de Seguridad Ciudadana -aprobada el pasado mes de septiembre de 2014- de firmar con los representantes sindicales el Reglamento de la Policía Local y el de funcionarios antes de que acabara ese año “Juan Miguel Polo sigue mintiendo y negándose a negociar con los representantes sindicales”, insisten desde CSIF.
Así las cosas, “a día de hoy no hay firmado ningún reglamento, a pesar de la obligatoriedad de tenerlo; lo único que existe es un pacto provisional en materia de organización del trabajo que se ha llevado a cabo tras la sentencia del juzgado de lo Contencioso Administrativo nº 3 de Huelva que obligó al Ayuntamiento de Cartaya a sentarse a negociar. Todo ello después de las denuncias presentadas por las imposiciones de los cuadrantes de trabajo y la negativa de Polo a dialogar con los sindicatos”.