El periodista Rafael Adamuz ha presentado en el día de hoy su primera novela ante los internos del Club de Lectura en la sala polivalente del área sociocultural de la prisión onubense. Los veinte componentes del Club así como la mayoría de los profesores del centro penitenciario se habían leído previamente el libro, lo que para un escritor es un auténtico lujo, poder hablar de su obra con quien realmente la conoce, con sus lectores.
El libro, que no novela, recupera un episodio insólito sucedido en 1936, cuando un grupo de onubenses, dirigidos por autoridades de nivel nacional y acompañados por guardias civiles, son recogidos en camiones desde Nerva hasta Huelva para dirigirse a continuación a Sevilla a “volar la Giralda y violar a las sevillanas”, cargados de armas y explosivos. Sin embargo una vez que llegaron a La Pañoleta, muy cerca de Sevilla, la situación cambia y fueron ametrallados por los propios guardias que les acompañaban. Los supervivientes fueron apresados en el barco Cabo Carvoeiro, atracado en el Guadalquivir, de cuyas bodegas sólo salieron para declarar. Setenta y cinco años después unas cartas escritas en el interior del barco relatan lo sucedido y Rafael Adamuz con lo que iba a ser su tesis doctoral que se convirtió en libro, nos relata el primer macro juicio de la historia del franquismo. El resto merece conocerse comprando y sobre todo leyendo el libro.
Después de ser presentado el autor, se proyectó el booktrailer del libro y los internos comenzaron a participar con sus opiniones y observaciones casi sin dar tiempo a las respuestas de Adamuz.
Los participantes casi se sabían de memoria el libro y algunos para refrescarla lo llevaban por escrito. Originándose una perfecta mañana de literatura, de opiniones… La mañana ha sido completa, Adamuz disfrutó de lo lindo y los internos más. Ninguno quería moverse pero Rafael, después de casi tres horas, era requerido por los internos componentes de la radio penitenciaria para ser entrevistado por ellos. Así que después de firmar varios ejemplares de su libro y escribir muchos recuerdos para los integrantes del club, fue obsequiado, con mucho agradecimiento y como recuerdo de su paso por el Centro Penitenciario onubense, con un precioso regalo hecho en hilo por los internos participantes en los talleres terapéuticos de la prisión. Rafael se despidió de todos los integrantes del Club de Lectura deseando terminar su segundo libro para volver al centro Penitenciario onubense para presentarlo.
Por último Adamuz fue recibido y felicitado por la Subdirectora de Seguridad del Centro Penitenciario que también se había leído el libro.