(Texto: Federico Soubrier) Lamento haber perdido mi tiempo viendo la anodina entrevista que realizó Gloria Lomana a Mariano Rajoy en Antena 3.

Tal vez uno, que cada vez está más mayor, se deja engañar con aquello de que un canal privado va a poner las cartas sobre la mesa, pero les faltó secarle un sudor de la frente al presidente que en ningún caso la empañaría, ya que evidentemente todas las preguntas estaban pactadas de antemano.

Aunque he leído cientos de comentarios en los que ponen a parir a la cadena, a la presentadora y a Don Mariano me extraña mucho que la inmensa mayoría sean anónimos y siento sobre todo no haber visto, leído, ni oído la menor queja desde una prensa “seria” haciendo alusión al respecto, lo cual concluye que esta sociedad está aborregada y se traga todo lo que le larguen, sin ser capaz de discernir quién es fiable y quién no, dando por hecho que la fuente siempre es imparcial.

Las intervenciones de la gente de a pie que aparecieron como cuña, además de ser contestadas con un batiburrillo indigno y sobreestudiado, no reflejaron la realidad en nada. Atiendo al público y oigo el devenir de la calle, no entiendo que nadie renegase de quien les ha engañado, recortado, entorpecido y sobre todo cercenado el futuro de sus jóvenes, entre otras muchísimas cuestiones perjudiciales enfocadas irremisiblemente hacia las clases más débiles.

Ni una sola pregunta sobre Bárcenas, ni sobre la financiación de Génova o tal vez un ratito de Rato hace parecer que la tres se está “agaviotando”.

¿Qué habría contestado, en el supuesto de que le hubiese preguntado algo así como: “Señor presidente, usted que mintió a todos los españoles y llevó a cabo una política totalmente opuesta a la de sus programas electorales, cree verdaderamente que va a haber algún tonto del culo que lo vuelva a votar?”.

O tal vez en referencia al Artículo 8 de la Constitución Española que reza : “Las Fuerzas Armadas, constituidas por el Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Aire, tienen como misión garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional”, ¿qué se puede estar cociendo si Cataluña impone la independencia?

Me pareció muy curiosa la imagen de los mundos de Yupi que presentó nuestro tal vez pronto vitalicio presidente y sobre todo el optimismo tras su trepidante fracaso electoral en Cataluña, justificado con un pésimo manejo de la estadística.

Por supuesto, volviendo a la deplorable entrevista, no tendrá que ver, ni quiero ser mal pensado, pero los dichos populares se deben tener muy en cuenta, y “dos que duermen en el mismo colchón se vuelven de la misma opinión”, lo mismo la señora Lomana, casada con un ministro de Aznar, ha perdido un ápice de imparcialidad y no es tan mala periodista, entrevistas así se les presentan a pocos profesionales a lo largo de sus carreras y son momentos claves incluso para marcar un hito histório.

Lo cierto, y la verdad, es que nos armaremos de paciencia hasta esa fecha conocida desde hace tiempo por todos y anunciada a bombo y platillo como primicia en el plató, el veinte de diciembre, día psicológicamente elegido para que el electorado esté atontado, despistado y contento en espera de las vacaciones, la lotería y la paga extra, pensando más en el turrón que en lo que se nos puede venir encima si el partido popular repite legislación.

Federico Soubrier García

Sociólogo y Escritor