La viceconsejera de Empleo, Empresa y Comercio, Antonia Moro, ha asegurado este viernes que el reto de la minería en este momento pasa por expandir la cadena de valor de esta industria “para no limitarla a la mera actividad extractiva”. Así lo ha puesto de manifiesto durante la inauguración de la jornada ‘La minería: oportunidades sociales y económicas, un reto para Andalucía’, organizada por el Consejo Económico y Social (CES), foro en el que ha destacado la cifra “notable” de explotaciones activas en la Comunidad.
En este sentido, Moro ha destacado la “intensa” revolución que se ha producido en este sector en las dos últimas décadas, que ha sumado en 2015 “hitos de suma relevancia”, año que ha sido un “verdadero reto para todos, Administración y sector”.
En relación a la expansión de la cadena de valor, la viceconsejera ha explicado que “todo yacimiento tiene una vida útil más o menos limitada, que nos obliga a trabajar con las luces largas para que las comarcas mineras hayan desarrollado un ‘know-how’ que evite su caída al ostracismo económico”.
Igualmente, Moro ha mencionado el estudio científico de la Universidad de Huelva que analizó la incidencia de dos yacimientos en sus comarcas y que reveló que el índice de afiliación a la Seguridad Social en los municipios de estos yacimientos se había incrementado en un 34% con la apertura de estas minas.
Además, ha subrayado la importancia de la capacidad tractora de la actividad minera y ha puesto como ejemplo los datos de actividad ofrecidos por los complejos mineros de Cobre Las Cruces y Aguas Teñidas, que señalan que cada uno de ellos cuenta con alrededor de 100 empresas contratadas: no sólo especializadas en extracción y tratamiento de mineral, sino también en transporte de personal y mercancías, restauración, medio ambiente, seguridad, etcétera.
Por otra parte, la viceconsejera ha remarcado el potencial de industrialización y reindustrialización de la minería, considerando “conveniente” recuperar parte del tejido industrial deslocalizado en países emergentes, “no sólo por la incidencia que tendría en el empleo, sino también el incremento de la competitividad que implicaría para el sector”.
“La cercanía a la fuente de producción de materias primas sería una ventaja extraordinaria que no todos los territorios pueden ofrecer. Y además se complementa con otros factores decisivos, como la existencia de una excelente red de infraestructuras, de capital humano altamente cualificado y de una estabilidad político-administrativa que garantiza la seguridad de la inversión”, ha apuntado.
A este respecto, ha destacado el apoyo “decidido y mantenido” en el tiempo del Gobierno andaluz al sector, un apoyo que ha sido “fundamental” a la hora de su reactivación y de hacerlo, además, con un modelo de minería completamente diferente al que se desarrollaba el siglo pasado.
“Hemos puesto en marcha una minería moderna, donde la innovación ha sido un factor clave para la viabilidad y la sostenibilidad de muchas explotaciones”, ha incidido Moro, quien además ha defendido esta minería donde la rentabilidad de una mina ya no se mide exclusivamente en términos económicos, pues ahora prevalecen también cuestiones sociales y medioambientales.
En este sentido, ha mencionado la nueva Estrategia Minera de Andalucía 2020, en la que la Junta está trabajando y que, entre otros, tiene como objetivos la mejora del tejido empresarial asociado al sector minero, la integración ambiental y puesta en valor del patrimonio minero y profesional el denominado capital humano.