La Consejería de Economía, Empresa y Comercio, a través de la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía (IDEA), ha puesto en marcha la convocatoria 2016 de los Incentivos al Desarrollo Industrial y a la Creación de Empleo, que cuenta con un presupuesto como mínimo de 70 millones de euros y están destinados al apoyo de los proyectos empresariales de pymes y micropymes.
El delegado territorial de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, Manuel Ceada, ha explicado que la nueva convocatoria, para la que se pueden presentar las solicitudes a través de la página web de la Agencia IDEA (http://www.agenciaidea.es) hasta el 31 de mayo de 2016, tiene como destinatarios a las pymes y autónomos del sector industrial y servicios a la industria (o para otros sectores siempre y cuando se trate de proyectos altamente generadores de empleo) con sede en Andalucía o que vayan a desarrollar su proyecto en la Comunidad Autónoma, por lo que ha instado a los empresarios de la provincia a valorar la idoneidad de sus proyectos incentivables.
El delegado territorial, que ha estado acompañado por el gerente de la Agencia IDEA en Huelva, Miguel Ángel Mejías, ha destacado que se incentiva la creación de empresas (proyectos de emprendedores y nuevas iniciativas empresariales destinadas a crear nuevos establecimientos productivos en Andalucía) y el crecimiento y consolidación empresarial (proyectos de inversión industrial que supongan fuertes inversiones y creación de empleo, y proyectos de cooperación empresarial en los que se promueva el desarrollo de trabajos en los que varias empresas comparten recursos y capacidades para obtener sinergias).
En ambas líneas, creación y crecimiento, se apoyan específicamente los proyectos altamente generadores de empleo, entendiendo por tales aquéllos que, con un bajo nivel de inversión, conducen a la creación de un importante número de puestos de trabajo, y los proyectos cuya actividad se incluya como una de las prioridades dentro de la Estrategia de Innovación de Andalucía.
A través de tres tipos de instrumentos (incentivos directos, bonificaciones de tipos de interés y préstamos a bajo interés) se concede un incentivo base en función del tipo de proyecto: 15% de la base incentivable para proyectos de inversión industrial, de cooperación empresarial, de innovación vinculada a la Especialización Productiva y proyectos altamente generadores de empleo; 20% para nuevas iniciativas empresariales y 25% para proyectos de emprendedores y nuevas empresas innovadoras.
Este porcentaje se puede incrementar en función de una serie de características adicionales (un 3% por cada una): por cada empleo adicional; por adaptarse a la RIS3 (Estrategia de Investigación e Innovación para la Especialización Inteligente); por ser Empresa de Base Tecnológica; Empresa de Base Innovadora o pertenecer a sectores altamente tecnológicos; por pertenecer a la economía social o a colectivos prioritarios; o por ubicarse en espacios de innovación. Mención aparte merecen los proyectos que incorporen retorno de talento, cuyo porcentaje de incentivo se verá incrementado en un 6%.
No obstante, el tope de incentivo se sitúa en el 35% de la base incentivable en pequeñas empresas y hasta el 25% en las medianas excepto en el caso de creación de empresas, en el que el tope son 200.000 euros para emprendedores, y 600.000 euros para las pequeñas empresas en caso de que sean nuevas iniciativas empresariales y nuevas empresas innovadoras vinculadas la Especialización Productiva.
Nuevas órdenes de incentivos en 2016
Además de esta nueva convocatoria de la Orden de 2015, durante 2016 está previsto que se pongan en marcha dos nuevas órdenes de incentivos: una que continuará apoyando, de forma general, los proyectos de las empresas andaluzas una vez se cierre esta nueva convocatoria y otra específica para proyectos de I+D+i.
De la futura nueva orden general cabe destacar que agilizará la tramitación y la justificación de los expedientes mediante la eliminación de trámites y requerimientos y que está previsto que llegue a más sectores (actividades anexas a la industria y sector servicios) y tipos de empresas.
Por su parte, la orden de incentivos para proyectos de I+D tendrá como objetivo promover la investigación, el desarrollo y la innovación en el sector empresarial de Andalucía, fomentando el partenariado con los agentes públicos en el marco de las prioridades establecidas en la Estrategia de Innovación Andalucía 2020, RIS3Andalucia. Las estrategias de investigación e innovación para la especialización inteligente, RIS3 en su denominación en inglés (Research and Innovation Strategy for Smart Specialisation), es una de las condiciones previas que ha exigido la Comisión Europea a las regiones de los países miembros para acceder a fondos europeos dirigidos a la innovación, desarrollo y economía digital. En esta línea, las regiones debían identificar los sectores, dominios tecnológicos y entornos que presentan ventajas competitivas, para centrar en ellos sus políticas.
Andalucía fue una de las primeras regiones europeas en iniciar la elaboración de su estrategia RIS3 a través de la Agencia IDEA, que ha sido la responsable del diseño metodológico y juega un papel de coordinación en esta política transversal del Gobierno andaluz.
Con estas nuevas órdenes se persigue avanzar en el logro de objetivos marcados por el Gobierno andaluz para la implantación de un nuevo modelo productivo en Andalucia basado en la innovación y el conocimiento en el horizonte del 2020, como aumentar el peso del sector de la industria manufacturera en el VAB andaluz, elevándolo hasta el 18%; elevar el porcentaje de la aportación privada al gasto en I+D+i en Andalucia, situándolo en un 50% del total; o multiplicar por 2 el número de empresas innovadoras en Andalucía, entre otros.
La nueva convocatoria de Incentivos al Desarrollo Industrial y a la Creación de Empleo se suma a la entrada en vigor la pasada semana de la Ley de Medidas Urgentes para Favorecer la Inserción Laboral, la Estabilidad en el Empleo, el Retorno del Talento y el Fomento del Trabajo Autónomo, que recoge una inversión este año de 381,9 millones y prevé tener un impacto de más de 60.000 nuevos empleos, incluidos nuevos trabajadores autónomos.