Todos sabemos que el desarrollo tecnológico en los últimos años ha cambiado la vida cotidiana para siempre hasta tal punto que una de las fobias más comunes hoy en día es la nomofobia que se expresa en una sensación de ansiedad si nos hemos olvidado el móvil en casa o nos hemos quedado sin batería en nuestro dispositivo móvil (teléfono, tableta o portátil). Desde que el smartphone entró en la vida de los españoles, cada vez más gente y sobre todo jóvenes, desarrollan una dependencia psicológica del uso del móvil.
Además, según informes de la Fundación Telefónica, los españoles están en el primer puesto en Europa y en el cuarto puesto en el mundo en la utilización de los teléfonos móviles. Las redes sociales, el correo electrónico, las aplicaciones con juegos, desaprovechan cada vez más el tiempo libre y alejan de la vida real a más de 50% de los internautas en España. Esto se traduce en un mayor aislamiento social porque la gente presta atención más a su propio móvil que a la persona que la acompaña. El fenómeno llamado “phubbing” que desgraciadamente se observa en mayor grado entre los niños y los adolescentes, se convierte en un problema muy común en las relaciones familiares y de pareja.
Sin embargo, las nuevas tecnologías no se limitan solo con el uso de los smartphones sino incluyen también todo tipo de dispositivos que conectan a los usuarios con Internet. El impacto negativo de la proliferación de cualquier tipo de actividad virtual se refleja sobre todo en problemas como intromisión de terceras partes en su privacidad por exponer su información y datos personales en Internet sin ninguna precaución. Una de las preocupaciones principales de los españoles es que la comunicación entre las distintas generaciones se ve más perjudicada y esto resulta en una peor educación de los pequeños de la casa por falta total de tiempo y ganas de hablar.
Pero como el desarrollo de las nuevas tecnologías es algo muy positivo en muchas áreas de la sociedad contemporánea, resulta imprescindible informarse bien sobre todo que uno desea realizar online. Desde las tiendas en línea donde se planea hacer compras hasta los sitios de juegos donde uno desea relajarse. En la Red existen muchos sitios que proporcionan consejos y valoraciones sobre diferentes tipos de productos y como la información previa es muy importante como lo afirman en el sitio www.bestonlinecasino.com/es/, siempre es mejor prepararse antes de adentrarse en el mundo de los juegos, por ejemplo.
No obstante, el tema de las dependencias tecnológicas incluye en mayor grado los juegos y las apuestas en línea que muchas veces son unas de las actividades más frecuentes de los internautas después de la mensajería y las redes sociales. Muchas veces, las páginas que proporcionan apuestas deportivas, ofrecen también juegos de casino como se puede comprobar este hecho expuesto con más detalles en esta página. Las apuestas y el poker siempre han sido relacionados con la emoción que da el deporte y la posibilidad de poder ganar dinero fácil. Sin embargo, el límite entre el juego problemático y el juego recreativo puede ser peligrosamente sutil e imperceptible.
Nuestra sociedad está desafiando cada vez más formas de adicciones en la vida actual. La gente debe ser consciente de la existencia de los avances tecnológicos y al mismo tiempo saber reconocer las pequeñas diferencias entre la adicción y el uso razonable de las nuevas tecnologías. La Junta de Andalucia ha sido la primera en introducir el término de “adicciones sin sustancia” y su consejería de Igualdad y Políticas Sociales está trabajando en esta dirección para ofrecer mayor calidad en los servicios de prevención y ayuda a las personas con problemas relacionados con el juego patológico, los videojuegos, el uso del móvil e Internet.
