(Texto: Antonio de Padua Díaz) Acaba de cumplir 30 años de servicio al necesitado, al más expuesto y vulnerable, empeñada en hacer dichoso al discapacitado que sufre, llora y se siente solo. Al Jesús hermano nuestro necesitado de amor. Tal es su entrega a los más pobres y débiles que la Casa-Hogar El Cristo Roto de Gibraleón no se detiene ante las dificultades, segura de que Dios se halla a su lado y, por tanto, con su ayuda y por bien del necesitado, capaz de superarlas.
La Casa-Hogar El Cristo Roto, centro perteneciente a la Asociación de Obras Cristianas de Gibraleón -entidad que preside desde hace cuarenta años el sacerdote Diego Suárez Mora- se inauguraba el 4 de octubre de 1986 y tiene como misión acoger a las personas discapacitadas, en las cuales se refleja el rostro de Jesús mismo, contando con área asistencial, sanitaria, educativa, psicomotriz y rehabilitadora y de ocio y tiempo libre, al tiempo que los residentes del centro, hasta 107, pueden aprender en los talleres dedicados a la madera, la cerámica y la horticultura, además de asistir a clases de educación especial. El Cristo Roto llama la atención desde su nombre, y traspasando la cancela automática de su jardín ya sabes que la sonrisa es su divisa y el amor su emblema. Sus trabajadores tienen muy presente que para Dios ninguno de sus hijos es diferente a los otros.
Un desayuno compartido de trabajadores y usuarios ha servido para conmemorar tan destacado aniversario, en el que todos juntos han disfrutado de este 30 aniversario que dice mucho y bien del trabajo permanente, constante y entregado de la Casa-Hogar El Cristo Roto de Gibraleón hacia los más necesitados.
En palabras de su director, Mateo Reyes Palanco, “nosotros hemos querido revivir esa fecha de apertura de Cristo Roto y celebrarla con todos los usuarios y con todo el personal que componemos esta gran familia; ha sido un momento espectacular, donde hemos tenido un desayuno, hemos disfrutados todos juntos recordando un día de fiesta”, subrayando que “hoy toda la Asociación de Obras Cristianas, en sus 40 años de andadura, se siente orgullosa de haber celebrado este acto tan entrañable para todos nosotros”.
Actualmente, en la Casa-Hogar El Cristo Roto son atendidos 70 usuarios por parte 85 trabajadores, contando con tres residencias distintas.
